Detrás de María José Argenzio y Gerardo Chávez-Maza, una muestra que destaca cómo la vida encuentra espacio aun dentro del concreto. (Foto: ALESSANDRO CURRARINO)
Detrás de María José Argenzio y Gerardo Chávez-Maza, una muestra que destaca cómo la vida encuentra espacio aun dentro del concreto. (Foto: ALESSANDRO CURRARINO)

“Esta es una crítica, un llamado de atención. Aquí se muestra lo que ha sido la construcción de las ciudades a partir de que fuimos colonizados, la fricción entre la naturaleza y la arquitectura”. María José Argenzio explica por qué desarrolló “Nuevas crónicas del buen paisaje”, su individual que se inaugura esta noche en la Sala Luis Miró Quesada Garland como parte de la feria Art Lima.

La exposición nació de una residencia que la artista ecuatoriana hizo en Cusco en el 2013. “Allí investigué sobre la arquitectura incaica –acota Argenzio– y lo que me interesó fue cómo se mimetizaba con el paisaje. Esta cultura construyó respetando la naturaleza, era agresiva pero se mimetizaba por una cuestión cosmológica. Sin embargo, lo que se hace desde la colonia es arrasar”.

Gerardo Chávez-Maza, curador de la muestra, anota: “La exposición también tiene que ver con las referencias al paisaje que hacía Guaman Poma de Ayala y Juan de Betanzos en cuanto a la relación armónica del paisaje con la arquitectura y cómo todo cambia con los sistemas de control impuestos por los conquistadores. Las reducciones indígenas, por ejemplo, alteraban todo el paisaje para concentrar el poder”.
Toda esta información fue recogida por Argenzio (Guayaquil, 1977) durante su residencia y lo plasmó en “Nuevas crónicas del buen paisaje”. “Justamente la muestra se llama así porque se trata de una manera visual, material y sensorial de contar una experiencia. Esta es la materialización de una crónica”, dice el curador.

Según Chávez-Maza, las obras que se exponen no tiemblan al visibilizar la violencia que los humanos han causado a la naturaleza. Está, por ejemplo, una pieza hecha con planchas de mármol que se destacan por sus cortes y estar cubiertas por pan de oro, detalle que hace referencia al anhelo de los conquistadores. Él sentencia: “En tiempos de falsas ideas sobre el desarrollo, esta muestra es una forma de combatir las políticas de construir por construir, de mostrar que el hombre sigue políticas que no son sostenibles y que, aun así, la naturaleza sigue sobreviviendo”.

Más información
Lugar: Sala Luis Miró Quesada Garland. Dirección: Av. Larco 400, Miraflores. Inauguración: hoy, desde las 7 p.m.

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