IPD: las razones políticas que explican la insólita cifra de seis presidentes en 13 meses

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Ayer se nombró a Guido Flores Marchán como nuevo presidente del organismo en reemplazo de Juan Carlos Huerta. Es decir, un sexto presidente en un año, desde enero del 2022. En todo este tiempo, tres presidentes estuvieron dos meses y uno llegó a cinco.

Guido Flores es profesor de Educación Física en la Universidad de la Cantuta, con un doctorado y varios investigaciones en su rama que se pueden ver en el portal de la mencionada universidad.

—Renuncia obligada—

Sin motivo aparente, el cambio de mando en el IPD obedece a una movida política, como muchas veces se ha dado. Incluso la llegada de Huerta al Instituto Peruano del Deporte en octubre pasado también se habría dado por presiones de la fuerzas armadas.

Deporte Total pudo saber que desde el inicio del gobierno de Dina Boluarte, siempre se le pidió dejar el puesto a Huerta. Primero fue la ministra de educación Patricia Correa quien se lo dijo vía oral. Luego Óscar Becerra -reemplazante de Correa- directamente le solicitó la carta de renuncia a Huerta por primera vez en la segunda semana de enero y a fines de ese mes le reiteró el pedido, que ayer fue oficializado.

“Se ha politizado demasiado el tema deportivo. Hay influencia política excesiva”, nos dicen fuentes que conocen el trabajo del IPD desde dentro. Lo que se busca es sacar a gente que trabajó con el gobierno de Pedro Castillo. Por ejemplo, con Huerta llegaron César Pogui (gerente general), Carola Bustamante (asesora y encargada del personal), Nelly Rodríguez (jefa de administración), Vicente Carrasco (presupuesto) y Amparo Sánchez (comunicaciones), quienes antes habían trabajado en el Ministerio de Defensa.

Según nos comenta nuestra fuente, Amparo Sánchez es muy allegada al círculo de Aníbal Torres. Su esposo Marcelo Puelles fue jefe de la oficina de prensa e imagen de la PCM. Por eso, nos cuentan, que una de las primeras actividades públicas de Huerta en el IPD fue con Aníbal Torres como invitado.

“Los cambios en algunos casos obedecen a cuestiones partidarias. Se olvidan que estos cargos tienen componentes técnicos como conocer el sistema deportivo”, lamenta Wilder Buleje, especialista en temas dirigenciales deportivos.

Wilder es muy crítico de los malos actos en el deporte nacional y en su portal “Ostra Olímpica” denunció la presencia de Nelly Rodríguez en el IPD: “venía con un cuestionamiento de la Oficina de Control Institucional del Ministerio de Defensa”, publicó. A pesar de que eso era público, Huerta la llevó a trabajar en el IPD.

Han sido meses de incertidumbre en el IPD. Para fines de febrero debe hacerse público el plan de subvenciones a los deportistas con miras a Santiago 2023 y se debe empezar a entregar los recursos económicos a las distintas federaciones, pero estos cambios pueden retrasar todo. Así, con seis presidentes en el IPD en un año, el deporte peruano muy poco puede avanzar.