Asociación de Afocat critica propuesta de SBS para regularlas

El debate sobre los seguros contra accidentes de tránsito está de nuevo en el Congreso de la República. Esta vez la discusión apunta a las 45 Asociaciones Fondo Contra Accidentes de Tránsito (Afocat) que existen en Perú, encargadas de la venta de los llamados CAT, Certificados contra Accidentes de Tránsito, que poseen beneficios iguales al Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) pero solo para transporte público en regiones específicas.  

La Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) detectó múltiples irregularidades en la gestión de los fondos de la Afocat y ha propuesto un proyecto de ley que busca reforzar su gestión y supervisión. El proyecto fue debatido en la Comisión de Economía y Finanzas la semana pasada y postergado a fin de recoger la opinión de las Afocat. 

En entrevista con El Comercio, José Ortiz Villanueva, vicepresidente de la Asociación Nacional de Afocat (Anafocat), que representa a 25 de las 45 Afocat del país, señaló que tras analizar el proyecto, están de acuerdo con la necesidad de reforzar la transparencia de las Afocat, pero observan varios aspectos.

“No estamos de acuerdo que la SBS se inmiscuya dentro de la vida institucional de las Afocat, que nos parametrice”, dijo el también director de convenios e imagen de Afocat La Libertad en relación a la iniciativa de crear un “consejo de vigilancia” a modo de órgano de control interno y de otorgar a la SBS la facultad de revisar y aprobar de manera previa el estatuto de las asociaciones así como sus modificaciones. 

En ese sentido, criticó la propuesta de trasladar de manera íntegra los recursos de venta del CAT al fondo de las Afocat que administra la Corporación Financiera de Desarrollo (Cofide), al que se destinaría el 80% de las ventas y el 20% se devolvería a las asociaciones para solventar sus actividades.  

“La norma nos convierte en una especie de ventanilla de recaudaciones de dinero y luego de atender los accidentes, y el dinero que excede [debemos] traerlo a Lima. Así está el modelo”, opinó.

“Hace años que le pagamos a Cofide por la administración y el costo de administración es superior al rendimiento que genera”, indicó, aunque no supo precisar a cuánto asciende la ganancia del fondo actualmente. 

En ese sentido, sostuvo que estiman que la intervención del Banco de la Nación (donde se debería abonar el pago de los CAT) generaría mayores gastos administrativos a las Afocat.  

También generaría mayores costos la contratación de personal para las centrales administradoras de dos o más Afocat si dicha misión es encargada a profesionales designados por la SBS, cuyos honorarios serían más elevados que los “se pueden encontrar en el mercado”, indicó Villanueva. Aun así, dijo que están de acuerdo con la medida, siempre que se aplique en Afocat de hasta 3.000 socios.

La Anafocat tampoco está de acuerdo con que la SBS sea la única institución encargada de autorizar asociaciones a vender el CAT.

Según indicó Villanueva, siete gobiernos regionales han autorizado el funcionamiento de Afocat y las Afocat delegan la función de venta del CAT a gremios de transportistas de provincias. “Contactamos con los gremios, con presidentes de asociaciones de mototaxis y le decimos tú vende, y él vende a su grupo. Cuando hay un accidente, nos llama. Estamos más cerca y él mismo atiende, porque es su compañero. De esta manera hemos democratizado el seguro”, dijo. 

“Esto no se podría hacer con esta normativa. Lo que pasa es que los funcionarios de la SBS no van a esos lugares. Ellos se imaginan un mundo como Lima, como San Isidro, como Miraflores. En Perú hay matices tremendos”, señaló.

IRREGULARIDADES 
La SBS ha advertido que las Afocat han cometido varias irregularidades, como la limitación de la participación de los asociados y reelección indefinida de dirigentes, dictámenes de auditores externos que resultan inadecuados, la falta de registros actualizados, carencia de cuentas bancarias, deficiencias en la emisión y venta de CAT y en el pago de la indemnización y registro contable, además de gastos administrativos por encima de los aportes. 

Consultado al respecto, Villanueva reconoció que hay Afocat que usan “el excedente” de las ventas para fines ajenos a su actividad. 

“En algunas Afocat, tal vez. Por ejemplo, el año pasado se pagaron todos los accidentes, no se debe nada. Hubo un excedente en una Afocat. Es normal. ¿Qué tal si compramos una ambulancia? Entonces, en la clínica ya no pagamos ambulancia y nos abarata los costos. Es normal”, dijo. “Está en el rubro”, comentó, tras ser cuestionado sobre la coherencia de usar el dinero con dicho fin. “Está contribuyendo a disminuir los costos de los accidentes”, alegó. 

También se han usado los “excedentes” para la compra de terrenos, dijo. “Es normal que toda institución tenga que crecer, que la Afocat quiera tener su propio local. Se compra un terreno, con los excedentes”, dijo, reconociendo que la SBS ha observado dicha conducta. “La SBS dice que se está usando mal el dinero”, parafraseó. 

“Esa parte del modelo no compartimos”, afirmó y resaltó que el gasto se efectúa con “excedentes”, considerando que “la responsabilidad de cumplir con los accidentados ya se cumplió”. 

Sobre las exigencias de la SBS, señaló que “piden un imposible” cuando se exige que la toma de decisiones se realice por mayoría cuando las asociaciones están integradas por miles de personas. En relación a la inexistencia de registros actualizados sobre los socios, dijo que varían cada día, a medida que se compran y venden los CAT.

Dijo que para atender este vacío Anafocat propuso a la SBS la implementación de un sistema informático mediante el cual las asociaciones puedan reportar en línea sus ventas, accidentes e indemnizaciones, pero la iniciativa no prosperó. 

La falta de reporte de siniestros suele suceder en Afocat pequeñas, dijo.

APORTES
Por último, Villanueva destacó que el CAT cuesta entre 50% y 59% menos que el SOAT, lo que lo hace atractivo para las unidades de transporte público, que operan 16 horas por día (seis veces más que un vehículo privado). 

Al mismo tiempo, sostuvo que las Afocat impulsan en provincia la “democratización” del seguro y la formalización del transporte público al ejercer un rol sensibilizador. En ese sentido, enfatizó que las aseguradoras que ofrecen SOAT no cuentan con presencia en estas zonas.

“Su presencia es en la ciudades importantes del Perú, pero al interior del país no tienen ni una oficina. Cuando hay un accidente, no hay quien los atienda”, dijo. “El transportista compra el SOAT, no para atenderse en caso de accidente. Sino para que el policía no lo moleste”, dijo. “Nosotros sí estamos en las provincias. Somos transportistas como ellos”, remató. Villanueva es asimismo dirigente de una empresa de taxis en Trujillo. 

DATO 

-En 2015 en el Perú se vendieron 608 mil CAT por S/62.5 millones.