“Debemos tomar conciencia de que tenemos la vida prestada y por lo tanto hay que cuidarnos con prevención y vivir procurando ser felices”.
“Debemos tomar conciencia de que tenemos la vida prestada y por lo tanto hay que cuidarnos con prevención y vivir procurando ser felices”.

1. ¿Qué aspectos de su personalidad considera que han incidido positivamente en su vida laboral?
Si algo me define es que soy muy perseverante. También mi introversión, que me lleva a ser analítico y lógico. Además, creo que otro aspecto importante es que soy espontáneo para solucionar los imprevistos. 

► 
► 
► 

2. ¿Cuáles, por el contrario, cree que son los aspectos que ha tenido que corregir o controlar?
En algún momento fue la inexperiencia y la inconsciencia, que me llevaron a cometer errores y elegir cosas –por suerte– transitorias.

3. ¿Cuál es el mayor reto que ha tenido en su carrera? 
Luchar contra la pasividad y el conformismo. Lo viví, por ejemplo, al resucitar a tres pacientes declarados fallecidos. Gracias a ello, he conseguido exportar casuística en foros internacionales, como lo hice en Washington en el 2004, donde mi trabajo fue clasificado dentro de las seis novedades para evitar la insuficiencia cardíaca posrevascularización tardía. Mi principio es: “Lo posible lo hago, lo imposible lo intento”.

4. ¿Cuál considera que ha sido su éxito más importante?
Mi familia, tener una familia unida y creyente en Dios. Mi esposa Patricia y mis hijos Franco y Cinthya, me enseñaron que no solo me debo concentrar en lo que hago, sino en lo que soy. Juntos pertenecemos a una comunidad de matrimonios (porque pasamos una crisis y una mano amiga nos rescató de ese abismo). Buscamos ayudar a otras parejas que están en crisis. Mi misión no solo es rescatar vidas, sino familias.

5. La cardiología hoy demanda mucha especialización, y los retos son cada vez más fuertes. Por ejemplo, atender a más jóvenes con problemas cardíacos. ¿Cómo ve su evolución a mediano plazo? 
Lo veo como una oportunidad para que la gente tome conciencia de que tenemos la vida prestada y por lo tanto debemos cuidarnos con prevención y vivir procurando ser felices. Si yo tengo la responsabilidad de una familia, debo cuidarme, hacerme chequeos, hacer ejercicios.

Por otro lado, hay una oportunidad para el sector salud, eso pasa por conocer más sobre qué es la muerte súbita y cómo atender esos casos cuando se dan. Saber que hay soluciones si se actúa con prontitud. Ojo, no es solo un problema de los médicos, sino del Estado.

6. Si se atiende con rapidez, la muerte súbita no es tan súbita.
Sí, es como un accidente, se puede resolver. Pero sobre todo, se puede prevenir, si ponemos todos de nuestra parte.

7. ¿Qué avance considera que ha aportado en cardiología?
En mi quehacer diario he ido consiguiendo prolongar la vida de mis pacientes, con calidad, implantándoles el corazón-pulmón artificial a aquellos que han sido desahuciados por falla cardíaca, o pulmonar extrema. Eso ha logrado inspirar a mis hijos, lo que me hace sentir muy orgulloso.

8. ¿Y qué hay de sus colaboradores?
Ellos forman parte del capital más preciado que tiene nuestra institución. Sin el personal –desde quien hace la limpieza hasta el cirujano más especializado– no lograríamos lo que hemos hecho en estos años.

Estamos muy agradecidos porque todos ellos están conscientes y adquieren experiencia en el rescate de vidas. Hace poco vino Susalud y preguntó al personal de limpieza cómo se lavan las manos y nos felicitaron. Lo mismo ocurrió con el chofer de la ambulancia. Somos una familia. Somos 73 personas, por ahora. Somos pocos y hacemos mucho. Nos turnamos, estamos, como se dice, 24/7, dispuestos siempre a servir.

Contenido sugerido

Contenido GEC