(Alessandro Currarino/El Comercio)
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Redacción EC

Tres jóvenes que el día del incendio en no acudieron a trabajar al edificio Nicolini vienen siendo resguardos por agentes de la Policía Nacional.

Los trabajadores, entre ellos un menor de edad, declararon ante el Ministerio Público que Jonny Coico Sirlopu y su esposa, Vilma Zeña, los encerraban en contenedores y no los dejaban salir ni para ir al baño.

En conferencia de prensa, el fiscal coordinador contra la Criminalidad Organizada, Jorge Chávez Cotrina, informó esta noche que los tres jóvenes son también víctimas del delito de trata de personas.

"Se ha descubierto el modus operandi (de Jonny Coico  y su esposa). Ellos no les decían que iban a trabajar bajo llave. Los jóvenes tenían que tocar la puerta para salir a orinar sino les daban botellas. Estamos trabajando para que estos hechos tenga la mayor sanción penal", dijo el fiscal coordinador.

Por su parte, el director de la División Contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes de la PNP, coronel Fredy Castillo Luque, señaló que los siete días de detención preliminar de los esposos Coico Zeña le permitirá a la Policía Nacional realizar las diligencias respectivas con mayor facilidad.

"Las pericias antropológicas y de la escena del crimen están pendientes y se realizarán en estos días para establecer el grado de vulnerabilidad de las víctimas", indicó el coronel PNP, quien además no descartó que hayan más implicados en este caso de trata de personas con subsecuente de explotación laboral, que acabó con la vida de Jovi Herrera y Jorge Luis Huamán.

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