"Por la democracia" (Foto: Difusión)
"Por la democracia" (Foto: Difusión)
Eduardo Lores

Esta época teatral, marcada por la discordancia política, alimenta la propuesta de cinco periodistas de opinión que, en colaboración con sendos teatristas, han escrito –en la presión de su urgencia y apurados por las elecciones inminentes– cinco microcomedias autónomas de 15 minutos cada una. La propuesta es de Idea Internacional, institución interesada en promover el cambio en la cultura política del Perú y que dirige Percy Medina. "Por la democracia" se presenta todos los miércoles en el tranvía llamado , llenando sus vagones escénicos de animado público que ve reflejado en ellos, gracias a actuaciones espectaculares, la mísera ridiculez política del llagado y purulento país de González Prada.

Algunos sketches plenamente teatrales hacen reír de indignación y otros, "teatralizados a expensas del teatro" como diría Badiou, ironizan los conflictos con cierta cortesanía.

El de Rosa María Palacios y Christian Ysla va al grano y no dora la píldora. Criollazo como él solo, el profesor de la "Korruption High School" enseñará, con eficaz método didáctico, cómo revertir las ingentes sumas que recomienda gastar en las campañas electorales. Los aplicados alumnos (el público) repetirán coreando con el profesor la respuesta de oro: "el 10%". Detallará, con cifras actualizadas, cómo es el negocio de la candidatura municipal, con el que se gana aunque se pierda; "de allí la cantidad de candidatos", explica con sorna. Ingeniosa, refrescante y bien actuada, la pieza nos habla también de quién está detrás: una periodista madura e independiente.

Lo mismo se puede decir de Augusto Álvarez Rodrich que, con Ebelin Ortiz, ha pergeñado "La misma vaina", discursos de distintos innombrables de la nauseabunda actualidad política, interpretados con gracia por el experimentado Gonzalo Molina, que debe ponerse al día cada semana por la proliferación de nuevos elementos teatrales en el panorama político, como el inverosímil plañido de la Señora K.

"Contigo Perú (mitin en un acto)", la obrita de Marco Sifuentes, está en la antípoda de la "Korruption High School". Gracias a la colaboración de Federico Abrill y Jorge Villanueva, y a la convincente actuación de Mario Velásquez, logra conmover al espectador que observa cómo la autenticidad y franqueza de un candidato son el peor impedimento para su éxito en la "política".

El show de títeres de Mónica Delta, "Diálogo de sordos", y el monólogo de Mijael Garrido Lecca, "Elections challenge" son más condescendientes. El primero, con la participación de Pablo Saldarriaga como titiritero, recrea la atmósfera circense del hemiciclo limeño. Protagonista y antagonista, una de derecha y la otra de izquierda, parlotean incansablemente sobre temas irreconciliables del toma y daca cotidiano de los 'otorongos'. El segundo, gracias a una sólida performance de Fabiola Coloma como frívola 'influencer', da unas cuantas pinceladas sobre la inconducente idiosincrasia urbana contemporánea de la Lima metropolitana.

AL DETALLE
Puntaje: 3/5 estrellas
Dramaturgia y dirección: Mijael Garrido Lecca y Fabiola Coloma; Mónica Delta y Pablo Saldarriaga; Rosa María Palacios y Christian Ysla; Augusto Álvarez Rodrich y Ebelin Ortiz, Gonzalo Molina (actuación); Marco Sifuentes, Federico Abrill y Jorge Villanueva, Mario Velásquez (actuación).
Lugar: Microteatro de Barranco (hasta el miércoles 10).

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