Las últimas observaciones de la sonda WISE ponen en duda que un asteroide de la familia Baptistina fuera el causante de la desaparición de los dinosaurios en la Tierra hace 65 millones de años, según un estudio difundido hoy por la NASA.
Los científicos están seguros de que un gran asteroide impactó en la Tierra y causó la extinción de los dinosaurios y algunas otras formas de vida en nuestro planeta, aunque desconocen exactamente su origen.
En 2007 un estudio realizado por científicos del Instituto de Investigación Southwest, en el Colorado, con telescopios terrestres apuntó por primera vez como sospechoso a un asteroide de la familia Baptistina, situado en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter.
Según esa teoría, el asteroide Baptistina impactó con otro asteroide del cinturón hace 160 millones de años, que despedazó al primero en fragmentos tan grande como montañas, uno de ellos se creía que había llegado a la tierra causando la extinción.
Sin embargo, con las observaciones realizadas con los instrumentos de infrarrojos de la sonda WISE (Wide-field Infrared Survey Explorer) han dejado libre de sospecha a este asteroide dejando abierto el caso de uno de los grandes misterios de la Tierra.
DEBIÓ IMPACTAR ANTES Durante más de un año el equipo examinó la reflectividad y el tamaño de 120.000 asteroides, incluidos 1.056 miembros de la familia Baptistina, y descubrieron que la ruptura del asteroide padre se produjo hace unos 80 millones de años, menos de la mitad del tiempo sugerido anteriormente.
Con estos datos los investigadores pudieron calcular cuánto tiempo le tomaría a los miembros de Baptistina para alcanzar su posición actual.
Los resultados muestran que para que este asteroide fuera el culpable de la extinción, tendría que haber impactado en la Tierra en menos tiempo de lo que se creía anteriormente para causar la desaparición de los dinosaurios.
Pero según la investigadora principal del proyecto NEOWISE en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA (JPL) que ha realizado el estudio, Amy Mainzer, no hubiera dado tiempo a que el asteroide causara la extinción.
SIN RESOLVER Como resultado de la investigación del equipo científico de WISE, la desaparición de los dinosaurios sigue siendo un caso sin resolver, señaló Lindley Johnson, encargado del programa de observación de objetos cercanos a la Tierra (NEO) de la NASA.
Los científicos están trabajando en un árbol genealógico de las clases de asteroides que hay en el cinturón para tratar de encontrar la pieza que coincida con las huellas que dejó el fragmento que cayó en lo que es ahora la península mexicana de Yucatán, dejando un cráter de 10 kilómetros, que acabó con el periodo del Cretáceo.