iPhone: nueve hábitos que seguramente tienes, pero perjudican la batería de tu móvil

Adquirir un teléfono móvil iPhone es siempre una gran apuesta. Son aparatos de una gran calidad, pero como cualquier otro dispositivo van perdiendo capacidad con el uso y el paso del tiempo, sobre todo la batería.

Para que puedas cuidar al máximo tu smartphone, a continuación, te dejamos una lista de nueve acciones que puedes estar haciendo –o dejando de hacer– y que degradan poco a poco la autonomía de la batería de tu equipo.

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No actualizar el software

Actualizar el sistema operativo cada vez que se lanza un parche es muy importante, no solamente porque se corrigen vulnerabilidades, sino que también se mejoran ciertos aspectos del software y, como no, la optimización de la batería.

Cargar el iPhone toda la noche

Si dejas cargando toda la noche tu equipo, cuando su batería este al 100 % dejará de cargar, pero apenas baje un poco, el cargador volverá a activarse. Esto genera que vaya dando carga y gastando la vida útil de la batería poco a poco. Con lo rápido que suelen cargar los teléfonos móviles hoy en día, es mejor hacerlo por la mañana.

Usar el iPhone mientras carga

Al cargarse, el dispositivo está generando calor y, además, si se utiliza mientras esto ocurre, se gasta energía que debe volverse a recupera nuevamente. Es cierto que mirar la hora o hacer una consulta breve no es grave, pero si se utiliza para jugar o ver películas es algo muy contraproducente y puede perjudicar su vida útil.

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Cubrir el teléfono con cualquier funda

Puede parecer algo exagerado, pero lo más adecuado es utilizar una funda homologada, ya que es menos transpirable. La batería, en lugar de estar refrigerándose, estará recibiendo el calor del dispositivo y acortando sus ciclos de carga. Mucho mejor usar las fundas aconsejadas por el fabricante, que suelen estar preparadas para esto, aunque tienen un precio un poco mayor.

Guardar el iPhone en el bolsillo del pantalón

Sonará raro, pero existe una razón. Cuando la batería supera los 32 grados –que es su temperatura óptima–, puede empezar a degradarse más de la cuenta. En vez de llevarla en los bolsillos de los pantalones podría ir en el bolso, la mochila o en la chaqueta, sitios que están alejados del calor corporal.

No utilizar cargador homologado

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Aunque se pueden conseguir a un precio más barato, los cargadores que no están homologados no cuentan con el amperaje exacto que necesita el teléfono, lo que puede degradar su batería.

Dejar cargando el iPhone en cualquier sitio

Aunque parezca increíble, si se deja cargando el dispositivo encima de la almohada, en un sillón o en una zona en la que no transpire, la batería ira perdiendo vida útil con más facilidad. Al cargar es normal que suba la temperatura, por lo que se necesita espacio para que se refrigere.

Utilizar la carga inalámbrica con mucha frecuencia

Aunque esta tecnología es muy interesante, ya que deja de lado los cables, al ser un tipo de carga menos eficiente y tener un menor aprovechamiento energético, puede reducir la vida útil de la batería.