Ya son 24 las selecciones que hicieron sus maletas para volver a casa. La mayoría tuvo un recibimiento multitudinario por la digna campaña hecha en Brasil. Argelia, que por primer vez en su historia alcanzó octavos de final, fue recibida por miles de simpatizantes, incluso el primer ministro Abdelmalek abrazó al técnico Halilhodzic, quien termina contrato pero goza del apoyo de la gente, mostrado a través de las redes sociales. La televisión pública tituló su emisión especial: “gracias, héroes”. Tras su recorrido por la ciudad, con el bus descubierto y los nombres de los jugadores escritos en la carrocería, el primer ministro les ofreció un iftar, la comida de ruptura del ayuno en este mes del Ramadán musulmán.
Los mapochinos fueron recibidos en el Palacio de la Moneda de Santiago de Chile por la presidenta del país, Michele Bachelet, después de su valiente participación, eliminados apenas por el anfitrión. “Son un tremendo orgullo para Chile”, declaró. Miles de personas acompañaron a sus héroes por las calles vitoreando a sus jugadores. En Uruguay, Mujica hizo lo propio frente a cientos de hinchas que cantaban el clásico “Uruguay, Uruguay, Uruguay”, con globos celestes y blancos, pancartas y vistiendo la camiseta celeste. Diego Godín declaró: “esto es hermoso, estoy orgulloso de nuestra gente y de ser uruguayo”.
Para Grecia, fue la debacle en el Olimpo. “Ustedes cayeron como Dioses. Ahora los queremos más... Muchas gracias”, señaló el diario Goal. “Hellas nunca llora”, titula SportDay. La radio estatal pidió a los hinchas no derramar lágrimas por éste equipo, que renunció a cobrar las primas, como prometió.
Cientos de aficionados abarrotaron el Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México para recibir a los jugadores provenientes de Brasil. “Se ganó mucho más de lo que esperábamos”, señaló el técnico en conferencia de prensa a su llegada. Después de caer eliminados frente a Holanda con dos goles en 6 minutos, pero con una gran actuación de su memorable arquero Ochoa.
Otra selección que regresó a casa con la frente en alto fue EEUU. Después de caer agónicamente frente a Bélgica, con un tiempo extra explosivo para Lukaku, quien ingresó tarde para superar a una cansada defensa americana. La labor del portero Howard fue crucial para terminar los noventa minutos con el arco a cero. “Me rompe el corazón. Duele mucho”, dijo a la prensa el portero que con sus 16 paradas no pudo evitar la caída. Los hinchas colmaron el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles. 16.5 millones de personas siguieron al equipo de Klinsmann por televisión. Todo un récord.