JULIO VIZCARRA @VizcarraJulio
Al parecer, la partida del Real Madrid fue lo mejor que le sucedió a Ángel Di María luego de perderse la final del Mundial Brasil 2014 por una lesión. En su debut en el estadio Old Trafford, el volante argentino demostró toda su calidad con el Manchester United.
En el 'Teatro de los Sueños', Di María tuvo mucha fantasía. El 'Fideo' regaló una gran actuación en la que fue determinante para que los 'Red Devils' golearan al Queens Park Rangers. Al igual que hace unas semanas con la selección argentina ante Alemania, 'Angelito' fue un verdadero líder, por juego y convicción. A los 24' abrió el marcador a través de un tiro libre que buscaba una cabeza de los suyos pero terminó metiéndose en el arco de Green.
Doce minutos después, nuevamente apareció Di María, que en ese momento del partido había dejado de lado su nombre y era el más 'diablo' de todos. Por el sector izquierdo, su banda, recuperó el balón en su campo y arrancó en velocidad. Y a partir de esa jugada, se fabricó el segundo del local, convertido por Ander Herrera.
Los lujos y asistencias se mantuvieron en el complemento. Cuando se jugaban los 58 minutos y mientras todos esperaban un centro al área, el argentino le dio un pase largo preciso a Juan Mata, quien controló de zurda y definició con calidad.
Después, conectó con otro zurdo. Esta vez fue Robin van Persie. Otra vez por el extremo izquierdo, Di María dio una asistencia sublime con la parte externa del chimpún de su pierna más hábil al holandés, quien remató al centro.
A falta de nueve minutos y tras una gran exhibición, el técnico Louis van Gaal decidió darle descanso a su estrella. Un Ángel que llegó de otra 'galaxia' pero que en poco tiempo cambió de bando y se volvió un verdadero 'diablo'.