Mesut Özil no ha podido superar sus problemas de espalda que lo han mantenido al margen del buen momento del Arsenal. El volante no disputa un partido desde el 05 de octubre, por la Europa League, frente al Qarabag, y preocupa al estratega Unai Emery. Sin embargo, han encontrado un posible causal: su adicción al videojuego Fortnite.
El volante dejó la selección alemana alegando haber sido víctima de racismo. “Soy alemán cuando ganamos, pero inmigrante cuando perdemos”, aseguró. Ahora ha encontrado un nuevo pasatiempo con el que combatir el tiempo libre mientras se recupera de su lesión: el Fortnite.
Sin embargo, este adictivo videojuego le está costando caro al Arsenal, debido a que aun no lo pueden recuperar del todo. El volante sufre de problemas en la espalda y la falta de descanso no lo deja estar en forma para competir.
La primera transmisión de Mesut Özil jugando al Fornite en Twitch fue vista por 243.531 usuarios
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El portal 'Wasted on Fortnite', donde se puede divisar el tiempo que pasa cada usuario conectado, Mesut Özil acumula 5.221 partidas desde el último recuento, lo que ofrece una media de cinco horas al día de dedicación.
El diario Bild de Alemania consultó a un médico especialista sobre este problema. Este confirmó que esta adicción estaría retrasando el regreso del jugador a los campos de juego, provocando que se agraven sus problemas en la espalda.
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