Primero fue Neymar el encargado de abrir el marcador ante el Celta de Vigo, pero la figura del Barcelona no se podía quedar atrás: Lionel Messi amplió el marcador a los 30' con una definición de alta calidad que mereció el 2-0 en el Camp Nou.
Andrés Iniesta demostró que está recuperando su mejor nivel: el volante sacó un pase milimétrico —de memoria— que fue muy bien capitalizado por el argentino. Messi tomó la pelota, pisó el área rival, se sacó con un amague a su marcador y definió con pierna derecha ante la salida del golero rival.