El comentarista de fútbol Fernando Niembro renunció hoy a su candidatura a diputado de la provincia de Buenos Aires por la conservadora Propuesta Republicana (Pro) tras el escándalo por supuestos contratos irregulares entre una empresa que fue de su propiedad y el Gobierno de la capital argentina.
“Quiero comunicarles que renuncio a mi candidatura a diputado nacional. Tomé esta decisión porque no quiero que me sigan utilizando para perjudicar al proyecto político al que pertenezco”, dijo Niembro en su carta de renuncia, difundida por el Pro.
El periodista quedó envuelto en un escándalo a raíz de una denuncia sobre presuntas irregularidades en la firma de contratos por unos 23 millones de pesos (unos 2,4 millones de dólares) celebrados con la productora La Usina, que fue propiedad de Fernando Niembro.
Niembro, que se retiró de la empresa hace un año y medio, es un reconocido comentarista deportivo que en los comicios de octubre iba a competir como primer candidato a diputado en la provincia de Buenos Aires por Pro, fuerza que a nivel nacional lidera el alcalde de Buenos Aires y candidato presidencial, el conservador Mauricio Macri.
Según denuncias del kirchnerismo, existirían al menos unos 160 contratos, celebrados entre 2012 y este año, en condiciones presuntamente irregulares, entre la empresa La Usina Producciones y la Secretaría de Comunicación Social de la Jefatura de Gobierno de la capital argentina.
Entre otras irregularidades, la productora no tendría empleados registrados y habría celebrado los contratos en forma directa con el Gobierno (sin pasar por licitaciones ni compulsas de precios).
“Soy víctima de un ataque injusto e inmerecido. No tiene sentido ocultarles que estoy angustiado, que me llena de dolor lo que está pasando. Conocemos estas formas de actuar, propias de una política que miente y ensucia al que piensa distinto”, afirmó Niembro en su carta de renuncia, en la que asegura ser una “persona honrada”.
El conductor dijo tener una “gran tranquilidad” sobre su “accionar” y que todo lo que ha hecho fue “transparente y acorde a la ley” y quedará “aclarado ante la sociedad y la Justicia con el tiempo”.
“Uno de los objetivos que tienen es probar que todos somos iguales a ellos, pero no lo somos. Yo voy a la Justicia, dejo de lado mis futuros cargos y fueros. ¿Los que me acusan harán lo mismo?”, se preguntó el comentarista deportivo.
El escándalo derivó en la apertura de una investigación judicial y un pedido de informes al Ejecutivo capitalino aprobado la semana pasada por la Legislatura porteña.
Por su parte, Macri dijo el jueves pasado que La Usina prestó al Gobierno capitalino servicios de elaboración de “encuestas de satisfacción al cliente” y “segundos de televisión (de publicidad) en el canal Fox”, donde trabaja el periodista, “que la ciudad (de Buenos Aires) consumió”.
EFE
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