Argumenta Sun Tzu en “El arte de la guerra” que “la mejor guerra es la que no se pelea”. Aterrizando el concepto a la idea de terminar con el ciclo (doce años) de Manuel Burga en la Federación Peruana de Fútbol (FPF), hay maneras de propiciar su salida sin llegar al conflicto, sin la injerencia del gobierno; por lo tanto, sin que la FIFA desafilie a la federación peruana de su sistema. Por ejemplo: la revocatoria, que está dentro de los estatutos de la FPF. Difícil, pero no imposible. Aquí todas las opciones:
1. LA ASAMBLEACompuesta por las 25 ligas departamentales y los 16 clubes profesionales, se necesita que el 40% (17 miembros) de estos integrantes convoquen una asamblea extraordinaria y en un acto de indignación lógica consignen que el 80% de los 41 miembros (33 votantes) decidan nuevas elecciones en la FPF.
¿Tendrán voluntad los actuales miembros de la asamblea de bases de enderezar el rumbo de la FPF? No hay antecedentes de ese tipo, pues Manuel Burga tiene ganada la preferencia, sobre todo, de los dirigentes más informales del país.
Este presidente no solo ha sido contemplativo con ellos; también los ‘engríe’ con viajes internacionales (partidos de selección, amistosos, reuniones en la Conmebol, etc.), viáticos y gollerías que estos dirigentes no hubiesen alcanzado por su propio desarrollo.
A pesar de todo y aunque suene utópico, si solo en Lima el 93% desaprueba la gestión de Burga, ¿cómo no conseguir que solo 33 votantes de dicha asamblea generen una revolución en el fútbol? La oportunidad más inmediata está ahí.
2. DELITO PENALEl cuestionado presidente estaría obligado a dar un paso al costado y afrontar sanciones legales si es hallado culpable de algún delito penal (que afecte el patrimonio de otro).
En ese sentido, la FIFA no actuará en defensa del mismo ni desafiliará al Perú. El máximo organismo del fútbol solo interviene cuando alguno de sus hombres es acusado por la vía civil y en el plano del manejo futbolístico y dirigencial.
3. CON CANDIDATOAunque los estatutos en la FPF están hechos para que siempre triunfe la reelección o un candidato heredero (Delfino dejó a Burga, por ejemplo), la aparición de un hombre que cumpla los requisitos para pelear en una contienda electoral abre una esperanza.
Dicho hombre tendría que centralizar sus esfuerzos en convencer a las departamentales y clubes de que su propuesta es superior a la actual. Pero lamentablemente no es solo eso, tendría que hacer un trabajo de inteligencia en otros aspectos para conseguir esos votos. No limitarse solo a la palabra, promesas y buenas intenciones. Ese parece ser el caso de Agustín Lozano, presidente de la Federación Departamental de Lambayeque.
4. LA REVOCATORIA
Según el Artículo 80° de los Estatutos de la Federación Peruana de Fútbol, la revocatoria de un presidente está permitida siempre y cuando se den los siguientes casos: a) por infracción grave a la moral deportiva; b) por sobrevenir alguno de los impedimentos establecidos en el ART.35° del presente estatuto; c) por ebriedad habitual o toxicomanía; d) por la comisión de delitos dolosos que hayan dado lugar a sentencia condenatoria.
El pedido de revocatoria, sin embargo, se formula ante la Junta Directiva por no menos del 40% del número estatutario de asambleístas, según el Artículo 81° de loe estatutos. Si es así, se nombra un comité y se procede a elecciones.