Alianza Lima pretende ser campeón en el Torneo Clausura. Guillermo Sanguinetti recibió el respaldo con esa condición y que los resultados no tarden en llegar. Por eso, el técnico recibió algunos refuerzos que se tienen que sumar al incremento del rendimiento de todos los jugadores del plantel de forma obligatoria.
Porque Alianza fue una cosa en el Torneo del Inca y otra absolutamente distinta en el Apertura. No había ningún vestigio del equipo intenso y con arrojo del verano con el que se vio hasta hace una semana. El sistema que propondrá el técnico y que aparece como ideal es el 4-2-3-1, con cargo a ser modificado según los rivales, escenarios y momentos de los partidos.
EL ARCOEstá George Forsyth como golero titular, pero no se descarta todavía la llegada de Leao Butrón. Forsyth tiene un problema: no se sabe cuando se puede lesionar y teniendo a Butrón como alternativa -o peleando el puesto de igual a igual-, esa preocupación se reduce.
LA DEFENSASe espera que los titulares Roberto Guizasola, Koichi Aparicio, Walter Ibáñez y Luis Trujillo vuelvan a encontrar la seguridad de la primera parte del año. Pero se ha sumado Miguel Araujo, joven defensor que regresó del Estrella Roja de Belgrado por problemas económicos y que bien podría iniciar el Clausura por Aparicio, quien presentó en los últimos meses una baja considerable de nivel. Así que la decisión es de Sanguinetti (¿Araujo o Aparicio?), pero jugar con línea de 4 no variará.
EL MEDIOCAMPODos hombres de soporte estarán en total evaluación. Por ahora Pablo Míguez y Josimar Atoche están escalones arriba de Paulo Albarracín, Jorge Molina y Edson Uribe. Eso sí, según las mediciones del técnico, jugarán los dos que estén mejor.
Una línea más adelante, en función de ataque, Sanguinetti propone una zona de gestación compuesta por 3 hombres, pero que serán los primeros en recuperar la pelota cuando la posesión sea del rival. En ello requiere a hombres muy laboriosos y con entrega comprobada. Se perfilan Christian Cueva, Gabriel Costa y Víctor Cedrón.
Cueva es una pieza clave en esta nueva versión aliancista. Tendrá la misión de alcanzar y superar lo expuesto por Junior Ponce en la primera mitad del año, quien era el hombre que provocaba desequilibrio al estilo tradicional blanquiazul. Esto generaba penales (para la efectividad de Walter Ibáñez) o faltas cercanas al área (tiros libres para Luis Trujillo) interesantes y que se convirtieron en los detalles que llevaron al equipo a ganar muchos partidos.
Ponce se fue de Alianza y la propuesta fue puro pelotazo. Ahora está Cueva, con el fútbol que supuestamente le devolverá la alegría a la tribuna, pero con la responsabilidad de estar a la altura en un torneo muy corto que lo necesita al 100% concentrado. Y definitivamente está por encima de lo ofrecido recién por Wilmer Aguirre.
Costa y Cedrón tienen reemplazantes naturales muy cercanos al titularato: Kahn y Landauri, respectivamente. Aquí el técnico también tendrá la decisión de escoger al que pase por mejor momento.
EL DELANTEROEs conocido que Alianza juega con un solo hombre de referencia en el área: Mauro Guevgeozián. Montes aguardará su oportunidad como buen profesional.
Esta es la radiografía del nuevo Alianza que tratará de pelear el Clausura. No hay abundancia, pero tampoco licencia para repetir un fútbol insignificante. El reto de Sanguinetti es recuperar la credibilidad que tenía en el plantel con el argumento sólido de “el espectáculo es ganar”.