Ante las pobres condiciones del campo en el estadio Azteca, México perdió la sede del partido de la NFL que iba a realizarse el próximo lunes. El encuentro entre los Rams de Los Ángeles y los Chiefs de Kansas City, iba a ser el cuarto de temporada regular que se disputara en la capital mexicana. Se realizará ahora en el Coliseum de Los Ángeles, casa actual de los Rams, informó el martes la liga.
Tras una revisión realizada por expertos de la NFL junto con los ejecutivos a cargo del Azteca se tomó la decisión de mudar el juego de sede. Los encargados de la inspección determinaron que el césped actualmente no cumple con las condiciones mínimas que se requieren para disputar un partido de la NFL y que tampoco las cumplirá para el próximo lunes. “Trabajamos extensivamente con nuestros socios en el estadio Azteca durante meses en preparación para este juego”, dijo el vicepresidente de la NFL Internacional, Mark Waller. “Hasta recientemente no teníamos preocupaciones mayores pero la temporada de lluvias y el calendario cargado de eventos en el estadio resultaron en un daño significativo al campo que representa riesgos innecesarios para la seguridad de los jugadores y lo hace inapropiado para recibir un partido de la NFL. Como resultado, determinamos que mover el juego es la decisión acertada”. La liga consultó con el sindicato de jugadores antes de tomar la decisión. En mayo, se retiró la cancha de pasto natural que se había empleado durante años en el estadio Azteca, el cual ha albergado dos finales mundialistas y está contemplado como sede de una tercera Copa del Mundo en 2026. A cambio del césped natural, se instaló una superficie denominada híbrida. Dicha tecnología combina pasto natural con sintético, y se ha empleado en otros reconocidos estadios del mundo, como el Camp Nou de Barcelona, el Stade de France, el San Siro de Milán y la mayor parte de los inmuebles de la Liga Premier, incluyendo Wembley. Pero la implementación de la nueva superficie dejó el césped con amplias zonas resecas que pudieron apreciarse durante los partidos de la liga local de fútbol. Los clubes América y Cruz Azul juegan en el Azteca sus encuentros como locales. El 16 de agosto, tras una primera serie de críticas, las autoridades del estadio Azteca dijeron que ese problema era habitual tras la colocación del pasto sintético y que la cancha mejoraría si se dejaba de usar un tiempo. Prometieron realizar trabajos especiales y aseguraron que quedaría lista “a la brevedad”. La cancha mejoró ligeramente luego de darle descanso durante 10 días, cuando paró la liga por una fecha FIFA. Pero se realizaron posteriormente en el inmueble varios partidos de fútbol, un par de conciertos de Shakira el mes pasado y otro recital organizado por la empresa Televisa, dueña del Azteca. Toda esa actividad dejó el pasto en condiciones incluso peores de las que habían generado las críticas originales. “La inusual y larga temporada de lluvias, así como el calendario de eventos pre-pactados con terceros en el estadio Azteca pudieron ser un factor por el que el césped está lejos de estar en óptimas condiciones”, informó el estadio Azteca mediante un comunicado, en el que agrega que “se revisarán los trabajos” de la compañía Tarkett, encargada del nuevo césped híbrido. El partido iba a ser el tercero de un contrato por seis años que la liga tiene firmado con México y con la cadena Televisa, que aún no ha dado a conocer su postura por la cancelación. La NFL tampoco informó detalles sobre qué pasará con ese acuerdo para el futuro. “Me siento desolado, enojado y avergonzado, todo eso junto”, manifestó el expateador mexicano de la NFL Raúl Allegre en una entrevista en la cadena ESPN. “Estoy tratando de discernir cómo en mentes pequeñas cupo la irresponsabilidad de no preparar un partido de esa magnitud. Sé que el mundo no gira alrededor de la NFL, pero este evento le da realce no sólo al deporte en México sino al país, y que lo hayan tomado a la ligera me parece inconcebible”. Para los numerosos y fervientes aficionados mexicanos al fútbol americano el cambio de sede es decepcionante. El encuentro entre los Chiefs y los Rams es apenas el quinto desde 1970 entre equipos con una derrota o menos en la semana 11 o posterior de la campaña. Ambos equipos tienen una foja de 9-1. Pero además, el cambio generaría preocupación sobre si se mantendrán en pie los futuros encuentros de la NFL en México. Después de un partido de temporada regular entre los 49ers de San Francisco y los Cardinals de Arizona, realizado en el 2005, la liga dejó de visitar el país y su regreso estuvo condicionado a mejorar las condiciones del estadio Azteca, inaugurado en 1966. Entre las modificaciones requeridas por la NFL estaba la construcción de vestuarios exclusivos y más grandes para los equipos, nuevas rampas de acceso al campo y mejoras en el palco de prensa. El césped no figuraba entre las condiciones exigidas. Luego de realizar las mejoras, la liga regresó a México en el 2016, cuando se enfrentaron los Raiders de Oakland y los Texans de Houston. El año pasado se disputó el encuentro entre Raiders y los Patriots de Nueva Inglaterra. Ambos partidos se realizaron sin incidentes mayores, en un estadio Azteca repleto y sobre su cancha de césped natural. La cancelación tiene además impacto económico. Los encuentros de los últimos dos años dejaron ganancias superiores a los 90 millones de dólares, de acuerdo con el titular de la Secretaría de Turismo, Enrique de la Madrid. El gobierno federal, a través de esa dependencia, pagó unos 14 millones de dólares por cada partido de la NFL. Es el segundo partido en la historia de la NFL que se cancela en el país. El 11 de agosto de 1968, se había programado un encuentro entre los Eagles de Filadelfia y los Lions de Detroit, que no se llevó a cabo, en el marco de tensión política de la época, en la que estudiantes protagonizaron protestas multitudinarias contra el gobierno. La nueva cancelación genera además una pesadilla logística para los equipos involucrados y para los fanáticos que viajarían a la capital mexicana desde otras ciudades del país y del extranjero. Muchos se quedaron con los boletos de avión comprados y con las reservaciones hechas para los hoteles. Los Rams anunciaron que se venderán boletos para el Coliseum desde este miércoles. Regalarán además miles de entradas para trabajadores de los cuerpos de emergencia y personas afectadas por los recientes incendios forestales. ESPN es otra organización golpeada por el cambio de sede. La empresa había hecho todos los arreglos para desplazar personal y equipo a la Ciudad de México, a fin de transmitir el encuentro. Ahora deberá llevar todo a Los Ángeles. “”Entendemos la decisión de la liga”, informó la cadena en un comunicado. “Estamos ya en el proceso de ajustar nuestros planes y estaremos listos para presentar este esperado encuentro del lunes por la noche desde Los Ángeles”.
Fuente: AP