Rio Alto Mining reprogramó la puesta en producción de su recién adquirido proyecto Shahuindo en Cajamarca para fines del 2015 o inicios del 2016, mientras integra las operaciones de esta propiedad con las de su mina La Arena (La Libertad).
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Así lo adelantó ayer, tras cerrar la compra de la junior Sulliden Gold (propietaria inicial de Shahuindo) en una operación valorizada en aproximadamente US$275 millones.
Shahuindo debía iniciar producción este año, pero llega con retraso pues Sulliden no avanzó con las labores de construcción. La falta de capital para desarrollar el proyecto (US$130 millones) lo obligó a venderlo a Rio Alto. Esta compañía dedicará algunos meses a evaluar puntos clave del proyecto. Su propósito es generar sinergias con su mina La Arena e intentar una ampliación en Shahuindo luego de su puesta en marcha.
“Las similitudes y proximidad de Shahuindo a nuestra mina La Arena nos permitirá aprovechar las habilidades de nuestros equipos operativos y gerenciales; y ahora que hemos completado la transacción, enfocaremos nuestros esfuerzos en incrementar las reservas de óxidos en La Arena y a construir Shahuindo”, dijo Alex Black, presidente y CEO de Rio Alto.
La canadiense estima producir 100 mil onzas de oro en Shahuindo desde el 2016, antes de abocarse a su ampliación, que triplicará la capacidad de diseño de la planta, de 10.000 toneladas por día a 30.000 toneladas por día.
Rio Alto producirá 200 mil o 220 mil onzas de oro en La Arena en 2015-2016. La producción combinada de ambas operaciones será de 300 mil onzas, aproximadamente.
Tras ser adquirida, Sulliden dejará de cotizar sus acciones en la Bolsa de Toronto y en la Bolsa de Valores de Lima. Eso ocurrirá en los próximos dos a tres días.