Ya sea inglés, francés o alemán, aprender un idioma con el pasar de los años puede ser un ejercicio más complicado que cuando uno era joven. Según estudios, esto ocurre porque el cerebro, con el pasar del tiempo, se vuelve menos receptivo a la nueva información. Pero el diagnóstico no significa que los adultos deban rendirse.Follow @EconomiaECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
TED —organización mundial dedicada a difundir ideas— implementó un “Proyecto Abierto de Traducción” en el que consultó a políglotas cuáles eran los secretos para dominar un idioma extranjero.
Según los expertos, las mejores estrategias están basadas en estos siete principios:
1. Pisar tierra firme. Hay que ser realista y plantearse una meta simple y alcanzable para comenzar a estudiar una lengua; es por ello que debe estar seguro de que no se sentirá abrumado. Judith Matz, traductora alemana, sugiere lo siguiente: “Recoja 50 palabras de un idioma y empiece a usarlas con frecuencia - y luego recopile la gramática lentamente”.
2. Que aprender un idioma signifique un cambio en su estilo de vida. Es un consejo que da Elisabeth Buffard, quien en 27 años como profesora de inglés ha reconocido que la consistencia es lo que separa a los alumnos exitosos del resto. Encuentra un hábito de lenguaje que puedas seguir incluso cuando estés cansado, enfermo o apasionadamente enamorado.
3. Para aprender un idioma, vive con él. Cuanto más invite a un idioma extranjero a tu hogar, más útil e importante lo considerará tu cerebro. “Use todas las oportunidades para exponerse al nuevo idioma”, señala la traductora rusa Olga Dmitrochenkova. Etiqueta todos los objetos que te rodeen con el idioma que estás aprendiendo; lee libros de niños; mira contenido audiovisual con subtítulos en el idioma o háblalo con un amigo imaginario.
4. Deja que la tecnología te ayude en el camino. Dmitrochenkova plantea una gran idea: “el solo hecho de cambiar el idioma de tu celular te puede ayudar a aprender nuevo vocabulario cada día”, precisa. Puedes utilizar Ditto para cambiar el lenguaje en tu buscador, o acceder a oportunidades de aprendizaje online mejor estructuradas. El traductor holandés Els De Keyser recomienda “Duolingo” por su aproximación a la gramática y “Anki” para memorizar el vocabulario utilizando fichas de aprendizaje “inteligentes”.
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5. Piensa en que aprender un nuevo idioma te abrirá las puertas a nuevas experiencias. Para el traductor español Sebastián Betti, aprender un nuevo idioma debe estar siempre ligado con las experiencias que este puede significar para alguien; ya sea “visitar parques temáticos, asistir a espectáculos aéreos, disfrutar de poesía de vaqueros y festivales de folk-rock o aprender sobre técnicas de ensayo fotográfico”, indica. En otras palabras, pensar en todas las cosas divertidas que uno quiere hacer, y convertir eso en una oportunidad para aprender otro idioma.
Muchos de los traductores de TED comparten este pensamiento. Para Anna Minoli, traductora de francés e italiano, esto era aprender a hablar inglés mirando sus películas preferidas en dicho idioma y sin subtítulos; mientras que Ivan Stamenković, traductor croata, se percató de que podía hablar inglés en quinto grado del colegio, tras haber visto Cartoon Network sin subtítulos. Así que la próxima vez que necesite una receta de zanahoria vegana, encuentre uno en el idioma que está tratando de aprender.
6. Haz nuevos amigos. Es clave interactuar en el nuevo idioma que está aprendiendo —te enseñará a utilizar tu intuición para expresar tus pensamientos, en lugar de estar traduciendo mentalmente cada oración antes de pronunciarla. Encuentra locutores nativos cercanos o busca amigos extranjeros para configurar un tándem de idiomas en línea. Este ultimo sistema permite que dos voluntarios se ayuden los unos a los otros a practicar sus respectivos idiomas.
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7. Comete errores, no pasa nada. Una de las mayores barreras cuando se está aprendiendo un idioma, —que impide a muchos practicar— es el miedo a equivocarse. Pero en este caso, debe saber que los hablantes nativos son como los padres: cualquier intento de comunicarse en su idioma es prueba objetiva de que usted es un genio dotado. Apreciarán su esfuerzo e incluso le ayudarán.
¿Siente nervios al mantener una conversación en el idioma que está aprendiendo? Trate de buscar a alguien más joven para empezar. “Me sentí bien cuando estaba charlando con un niño italiano y me di cuenta de que teníamos el mismo nivel de manejo del idioma”, recuerda la traductora alemana Judith Matz. Por eso, sea paciente: mientras más practique el idioma, más cercano estará al elusivo ideal de la “fluidez nativa”. Y así, podrás hablar con personas de tu misma edad.