En contraste con la bonanza de las empresas productoras de harina de pescado, cinco empresas conserveras y congeladoras del recurso marino dejaron de operar sus plantas ante la delicada situación que atraviesa el sector de consumo humano directo (CHD), alertó Alfonso Miranda, presidente del Comité de productos pesqueros y acuícolas de las Sociedad Nacional de Industrias (SNI).Follow @PortafolioECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Las firmas Pez de Exportación (Pezex), Andesa, Cardomar, Congelados Pacífico y Pesquera Morrosama cerraron sus plantas, afectadas por la falta de acceso a los recursos, “ya que se les aplica una normativa propia de la industria harinera de anchoveta, cuyas características son muy diferentes”, apuntó el empresario.
Así, el miembro de la SNI precisó que en lo que va del año se decretaron 26 vedas de pesca de anchoveta, que acumularon 222 días sin captura de este recurso, en las que se incluyó “sin sustento científico” -acotó- a la flota artesanal, principal proveedora de las plantas para consumo humano directo, tradicionalmente excluida de la medida.
De esta forma, el procesamiento de recurso marino para el consumo humano directo se vería reducido drásticamente. Tras los esfuerzos del Instituto Tecnológico Pesquero (ITP) que empujó la generación de la industria de congelado y conserva en el país, la misma que llegó a procesar 125 mil toneladas de anchoveta en el 2011, en el 2014 se obtuvo la tercera parte de este volumen y, según Miranda, este año el procesamiento “podría ser peor”.
PREOCUPANTE IMPORTACIÓN
El empresario de la SNI sostuvo, además, que hay frenos para la explotación racional de otros recursos porque se intenta trasladar la regulación harinera al congelado y enlatada.
“Es inconcebible que en un país que pesca millones de toneladas de anchoveta no se pueda conseguir este recurso para el consumo humano y se tenga que importar para la industria de consumo humano”, manifestó Miranda.
A ello, agregó que si bien el sector de consumo humano directo comparte las preocupaciones del Estado por contrarrestar la pesca y procesos ilegales que se pueden suscitar en las embarcaciones artesanales, no hay que olvidar que una sola nave industrial pesca en un año la misma cantidad de anchoveta que toda la flota artesanal.