Seguir a @menuperuoficial !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
La reconocida chef estadounidense y presentadora del canal Food Network, Sandra Lee, fue hospitalizada tras complicaciones surgidas luego de una reciente mastectomía doble a la que se sometió para luchar contra el cáncer.
Lee, de 49 años, fue llevada de urgencia al hospital el martes por la noche por una acumulación de fluido y se espera que sea monitoreada por un par de días.
La presentadora del programa de cocina “Semi-Homemade Cooking” se sometió a la cirugía en mayo luego que le diagnosticaron cáncer.
Su novio, el gobernador de Nueva York Andrew Cuomo, se fue más temprano de un concierto de Billy Joel en el Nassau Coliseum para estar con ella tan pronto se enteró de su hospitalización. Cuomo, quien es amigo de Joel, presentó al músico en el concierto.
La hospitalización fue confirmada a AP por una persona cercana a la familia que no estaba autorizada a hablar sobre la condición médica de Lee y que habló a condición de anonimato.
Un vocero de Cuomo remitió las preguntas sobre Lee a los representantes de ella, que no respondieron de inmediato mensajes el miércoles por la mañana.
Lee reveló que tenía cáncer de mama en mayo en el programa “Good Morning America” de la ABC. Le descubrieron la enfermedad durante una mamografía de rutina. Dijo que se decidió a hablar públicamente al respecto para exhortar a otras mujeres a que chequeen.
“Si salva a una persona y hace que una persona más vaya a hacerse una mamografía, y si están sentadas ahora mismo viendo esto, no vean esta TV”, dijo durante la entrevista. “Tomen el teléfono y llamen a su médico y vayan ya mismo a hacerse una mamografía”.
Sandra Lee, una chef de la televisión, es autora de libros de cocina y editora de revistas. Lee y Cuomo tienen varios años juntos. Comparten una casa en el condado de Westchester.
(El Comercio/AP)