Un dispositivo de 10 centímetros de largo instalado en vehículos particulares de Lima ha logrado revelar más información sobre el comportamiento de manejo que cualquier cámara de seguridad o examen de conducción. Se trata del sistema e-call, desarrollado hace siete años a iniciativa de la Comisión Europea, y que originalmente fue concebido para detectar choques y dar aviso a las centrales de emergencias. La mayor cantidad de usuarios está en Suecia, Finlandia, Reino Unido, Holanda o Eslovenia, y en algunas ciudades las compañías de vehículos están obligadas por ley a incorporar este aparato en sus modelos antes de venderlos.Pero este dispositivo, dotado de sensores de velocidad y ubicación, giroscopios y acelerómetros, también es capaz de registrar frenadas intempestivas, choques (y la intensidad de los mismos), desaceleraciones, cambios de carril repentinos y cualquier otro factor de manejo agresivo. Combina estos datos, por medio de algoritmos, con el tráfico registrado en la zona, la edad y el sexo del conductor y el clima, y arroja una calificación.
–Lo que pasa en nuestra calles–En Lima, la empresa ecuatoriana Tracklink, que distribuye el sistema e-call, recogió durante cerca de un año estos factores del estilos de manejo en 3.790 autos particulares con el dispositivo. Los resultados son preocupantes. Según la información obtenida por esta tecnología, el 40% de vehículos de Lima sufre algún choque de mediana intensidad en el año. En Europa, la frecuencia es inferior al 9%.El reporte arroja que el 80% de conductores tiene menos de 50 puntos de calificación, que es el mínimo aceptable establecido por Octo Telematics, una de las bases de datos vehiculares más grandes del mundo ubicada en Roma. En promedio, los conductores limeños tienen una calificación de 38.3 puntos. “Si este fuera un examen, el Perú tendría un 08”, dice Lorenzo Giordanelli, director de Tracklink.El sistema detectó que el incumplimiento de las distancias de seguridad entre el vehículo y las veredas u otros autos es uno de los descuidos más frecuentes entre los conductores limeños. “Y esto es un problema porque los imprevistos aparecen: si se cruza un peatón o un auto pero tengo una distancia puedo evitar el choque, pero si no respeto puedo ocasionar una muerte”, dice Giordanelli. Otro factor registrado fue la diferencia en el comportamiento de conducción entre mujeres y hombres. Se observa que las primeras registran colisiones con mayor frecuencia, pero que estos impactos tienen un promedio de apenas 2,9 G del nivel de fuerza (choques sin daños). Los hombres, en cambio, registran una menor cantidad de colisiones, pero estas pueden llegar a los 15 G, un nivel de fuerza capaz de destruir un carro.Los indicadores también indican diferencias de manejo en conductores dependiendo de su edad. En este caso, los mayores manejan mejor. Los choferes de 50 años a más tienen una calificación mayor a la de aquellos de entre 19 y 29 años.Según el INEI, cada año en Lima hay cerca de 50.000 accidentes de tránsito no fatales y un promedio de 500 accidentes con al menos una persona fallecida. En tanto, el Touring indica que los errores más comunes en los aspirantes a brevete son: la intención de ganarle a la luz ámbar, no identificar las señales de tránsito, y no utilizar las señales direccionales y los espejos.