El Poder Judicial ordenó la máxima pena de cadena perpetua en contra de un expolicía (42) que abusó sexualmente de su hijastra y de su sobrina. Fue hallado culpable del delito de violación sexual, en agravio de su sobrina, y de actos contra el pudor, contra su hijastra.
Estos hechos ocurrieron cuando las menores tenían siete y ocho años, en su vivienda de la zona El Ermitaño, en Independencia. El condenado vivía con su expareja e hijastra. A este lugar también llegaba su sobrina, lo que fue aprovechado por el sujeto para perpetrar su delito.
Se supo que ambas niñas callaron por miedo, al tratarse de un hombre violento. Es así que ahora las menores tienen 10 años de edad por lo que sus identidades son protegidas.
El caso fue seguido por la Séptima Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Lima Norte. El fiscal Carlos Enrique Verástegui Castañeda presentó entre los elementos de convicción, el certificado médico legal, la entrevista única de cámara Gesell, la pericia psicológica, la declaración de las madres de las víctimas, entre otros.
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