No solo el candidato a la alcaldía de Lima por Democracia Directa, Álex González, ha propuesto “drones para los ladrones”. Son varios los aspirantes a alcaldes en diversos distritos y provincias del país que han lanzado esta promesa.
No obstante, la iniciativa no sería necesariamente la más adecuada para luchar contra el flagelo de la inseguridad ciudadana. El docente de la universidad católica, Gustavo Kato, considera que la efectividad de estas unidades aéreas no tripuladas sería mínima.
“Los drones no van a servir para detectar un acto delictivo. El piloto del dron necesita tener línea de vista para volarlo y saber qué está haciendo. En Lima no existe un punto suficientemente alto para ver el dron al mismo tiempo se pueda informado de lo que pasa en tierra”, manifestó a Punto Edu.
De la misma manera, Kato llamó la atención sobre otros dos factores que involucran esta idea: la poca duración de las baterías y las consecuencias que podría conllevar que los drones sufran accidentes.
“Si un dron se accidenta, es grave: son ocho kilos de un equipo de 25 mil dólares que le puede caer a cualquier persona desde una altura considerable”, añadió al referido portal.
Por último, el especialista remarcó que los drones para el combate de la inseguridad no son utilizados masivamente en todo el mundo. Según dijo, “Si los drones pudieran emplearse para seguridad, habría mil drones volando en Nueva York y persiguiendo delincuentes, pero no hay porque no son prácticos”.