JENNIFER PELÁEZ
Demetrio Túpac Yupanqui es un quechuahablante de 90 años, nacido en Cusco, que se ríe de los prejuicios que lo han perseguido debido a su procedencia, su apellido y por el amor incondicional hacia su lengua.
El 27 de julio su academia ‘Yachay Wasi, ubicada en La Perla, Callao, cumplió 49 años dedicada a la enseñanza y difusión del denominado 'idioma de los incas'. Por las aulas de 'Yachay Wasi' han pasado, por ejemplo, las ex primeras damas Eliane Karp y Keiko Fujimori. Además allí se tradujo al quechua nada menos que e' “El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”, por lo cual la academia de don Demetrio recibió un reconocimiento del rey Juan Carlos I.
“Actualmente el principal problema es la falta de profesores, pero esta lengua es fundamental para la cultura nacional. No hay preparación en la técnica de la enseñanza”, asegura don Demetrio.
Para él la solución no radica en que el quechua sea impartido de manera obligatoria sino en la preparación de los que van a inculcarlo. “El ministerio ordena que se dicte en las escuelas pero no hay personal. Lo que falta es que el Estado abra los ojos y pida que vengan lingüistas extranjeros para que preparen bien a los profesores”, sostiene.
En cada palabra se le nota el orgullo por el legado oral heredado: “El español es lineal. En el inglés hay un canto pero el quechua es sinfonía pura. Si hablamos de la escritura nos damos cuenta hasta de la intención de la persona que está escribiendo”.
Con un plumón en la mano, don Demetrio demuestra lecciones rápidas que reflejan sus dotes como maestro e insiste en que aprender quechua “no es difícil”.
Para Túpac Yupanqui hoy en día este tema no significa mucho para los peruanos porque no les interesa. Incluso cree posible que la lengua que habla desaparezca. “Lo que se ignora no se quiere“, asegura.
Las clases en la academia Yachay Wasi, ubicada en el pasaje Mar del Caribe 232, La Perla, Callao, empiezan todos los meses.