La idea del plagio o de la copia en el arte es maleable y subjetiva, desde el simple hecho que existen quienes utilizan métodos de apropiación como combustible creativo. Pero este no parece ser el caso que dio a conocer hace unos días el artista peruano Nader Barhumi: unas pinturas en venta en una tienda de San Isidro que imitan su obra sin pudor.
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Se trata de unos cuadros expuestos en Home Gallerie, negocio ubicado en la Av. Conquistadores 1054. “Un amigo me envió las fotos, así que yo fui hasta allí y me encontré con unas ocho obras que estarían haciéndose pasar por mías”, cuenta Barhumi sobre el incidente ocurrido esta semana. “Y no es una persona que me copia solo a mí, sino que hay obras muy parecidas a las de Gam Klutier, Eduardo Tokeshi, Giorgio di Giovanni, Cuco Morales. Imita los lenguajes que hemos desarrollado”.
Aunque en un inicio Barhumi pensó que se trataba de falsificaciones –como aquellas versiones apócrifas de José Tola o Gerardo Chávez, denunciadas el mes pasado–, en realidad vienen firmadas por su autor, de nombre Juan Puente Gómez. “Este caso está en una especie de zona gris –opina Barhumi–. El señor Puente firma las obras muy discretamente, con un trazo bien delgadito y finito, abajo en el cuadro. Si tú las ves y no estás realmente familiarizado con mi obra, puedes creer que son mías”.
Barhumi señala que los cuadros que encontró son copias de una serie en particular que él realizó hace unos años, de círculos pintados. “Yo he visto muchas veces el trabajo de jóvenes artistas que se pueden influenciar, eso es normal y me parece hasta bacán. Yo mismo he sido influenciado por otros. Pero ya sobrepasa lo que es la influencia. Yo creo que se está tratando de engañar”, agrega el artista.
HABLA EL SEÑALADO
Juan Puente Gómez, el autor de estos supuestos plagios, señaló a El Comercio que no fue su intención cometer un plagio. “No son copias, sino influencias. Yo me he inspirado en ciertos artistas. A veces cojo la técnica, el moteado, la textura. O los símbolos precolombinos que Gam Klutier usa mucho. Siento atracción por el estilo, pero no es que quiera copiar”, declaró vía telefónica.
Puente, artista chiclayano que afirma haber seguido estudios de arte y diseño gráfico, dijo también que ofreció disculpas a Barhumi y que ha decidido retirar las obras de Home Gallerie. “Yo ya las he regresado a mi taller para modificarlas y que no se parezcan, que sean más originales. Pero vuelvo a decir que nunca he intentado copiar. Es más, la obra del señor Barhumi también se parece a la de artistas de otros países. Entonces ¿cuál es lo original?”, agrega.
Barhumi cuenta también que hace unos años la tienda Home Gallerie tuvo obras suyas en su catálogo. “Ellos saben quién soy, y por eso me extraña que estuvieran vendiendo obras que son una copia. Pero la verdad es que, más allá de pedirle a la tienda que arregle su gallinero, no creo que pueda hacer mucho más”, afirma.
El Comercio se comunicó con Úrsula Martínez Korswagen, CEO de Home Gallerie, pero se negó a hablar sobre el tema. “Yo no tengo nada que ver, no conozco la situación. Me llamó el señor Barhumi, pero en mi tienda no hay ninguna obra del señor Puente. No tengo nada que decir sobre el asunto”, respondió.
¿IMPLICACIONES LEGALES?
El abogado y coleccionista de arte Alfredo Barreda señala que, en el campo de la pintura, no existe algo así como un derecho de autor por la forma de pintar. “Lo que sí está penado es el copiar con el ánimo de falsificar. Y eso, más que una cuestión de derechos de autor, es un delito de estafa contra quien haya comprado una obra –explica–. En ese sentido, lo que dice el señor Barhumi respecto a que no se trataría de una falsificación, pues lleva la firma del autor, es correcto”.
En este caso en particular, sin embargo, Barreda afirma que la acción de copiar el estilo de un artista habla muy mal del creador. “Un artista que copia a otro artista es alguien que fracasó y que se debería dedicar a otra cosa. Y ni siquiera es algo que no debería hacer por ser impropio o porque no sea ético, sino porque es una actividad autodestructiva. El buen artista siempre va a tratar de ofrecer al mundo una propuesta propia e innovadora”.
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