Maribel Guardia es una actriz que ha sabido reinventarse, al punto de conquistar tanto las telenovelas como las redes sociales. Solo en Instagram tiene más de 5 millones de seguidores. Nada mal para una figura de más de 60 años pero que aparente mucho, mucho menos.
Aunque nadie discute que su talento y belleza la han llevado a alcanzar cosas grandes, éstas no habrían sido posibles si es que detrás de ella no hubiesen estado personas muy importantes en su vida y formación; algo que resultaría complicado para quien jamás tuvo la presencia de un padre y perdió a su madre a causa del cáncer cuando tenía solamente nueve años.
Pese a la triste vida que le tocó enfrentar desde que era pequeña, la actriz costarricense tuvo a alguien que la ayudó a salir adelante. Nos referimos a su hermana mayor Vilma, quien al ver que había quedado sin nadie que se hiciera cargo de ella, se la llevó a vivir con a su casa; motivo por el cual se siente muy agradecida y la considera su otra “mamá”.
“Mi hermana me llevó con ella, me crio, me educó y ha sido una mujer extraordinaria en mi vida. Ella estaba casada y tengo un sobrino que era de mi edad y nos criamos como si fuéramos hermanos; lo quería muchísimo y mi hermana la verdad es que fue una madre extraordinaria, una mujer muy mágica, también me dio muchas alas para volar”, dijo en una entrevista al programa ‘El minuto que cambió mi destino’.
Debido a que se siente muy orgullosa de ella, la actriz de 61 años, en más de una oportunidad, ha compartido fotos con Vilma, a quien le agradece por haberla convertido en la persona que es ahora. Pese a las imágenes que sube en sus redes sociales, muchos desconocían quién era esta persona.
“Un ángel que Dios puso en mi camino, un regalo de Rita, la madre de las dos, que murió muy joven”, describió la actriz a su hermana.
Maribel no deja pasara ningún momento especial para dedicarle palabras de agradecimiento, admiración y respeto. “Yo tuve la suerte de tener dos madres: una en el cielo, mi inolvidable Rita que me dio la vida y llenó mi infancia de amor y magia hasta mis nueve años, y después mi hermana Mima, mi segunda madre. Adoro a estas mujeres valientes, amorosas y protectoras que me dieron alas para volar #bendiciones para todas las mamás”.
En la última celebración por el Día de la Madre le escribió: “Vilma siempre viene para que la celebre en su día, pero este año es diferente. No la voy a ver, ni ninguno de mis dos hermanos, se va a quedar en su casa y por videollamada le voy a decir cuánto la amo porque es la mejor mamá del mundo”.
Aunque todos destacan la labor que cumplió su hermana mayor en la vida de la actriz, algo que no ha pasado desapercibido es cómo ambas se mantienen muy bien pese a los años. Como sabemos, Maribel tiene 61 y su hermana, 81.
Los internautas consideran que la juventud que Maribel y Vilma Guardia mantienen lo llevan en los genes.
LA TRISTE HISTORIA DE SU NIÑEZ
“Yo me quedé solita a los nueve años”, dijo la actriz de ‘Corona de lágrimas’ en el programa ‘El minuto que cambió mi destino’, al recordar la muerte de su madre a causa del cáncer a los 46 años.
“A partir de eso me dio insomnio hasta el día de hoy porque yo tenía una relación muy cercana con mi mamá”, narró.
Pero la parte más conmovedora que la llegó a marcar de por vida fue cuando vio a su mamá fallecida, algo que no entendía al principio hasta que la empezaron a enterrar.
“Cuando la vi muerta en la caja yo no entendía por qué ella estaba tan seria; entonces, entré como en una especie de juego. Era un lugar muy grande donde la velaron con un jardín muy grande; entonces, yo salía corriendo y jugaba con ella y le hablaba y le decía ‘mamá esa que está allá arriba no eres tú’ y entonces jugaba. Todo el mundo lloraba y yo entraba corriendo y juraba que mi mamá estaba conmigo, pero en el momento que ya la fuimos a enterrar, cuando echaron la tierra, ahí fue donde yo reaccioné”, manifestó.
Tras ese día, Maribel Guardia dio a conocer que soñó nueve noches seguidas con ella: “Volábamos y nos sentábamos al lado de un río; platicábamos vestidas de blanco y ya después no la volví a ver más. Hasta el día de hoy tengo insomnio”.
Debido a que se había quedado sin nadie que se hiciera cargo de ella, su hermana mayor la llevó a vivir con ella.