La artista chilena Mon Laferte se encuentra en un momento de plenitud laboral y personal. En unos meses será madre de un niño que llevaba tiempo buscando y su nuevo disco “1940 Carmen”, que confiesa este martes en entrevista con Efe es “hormonal” e “improvisado”, está teniendo una gran repercusión.
“Yo estaba en hormonas fatal, llevaba ya un montón todo el tiempo. Era un ‘shot’ diario de hormonas y estaba muy sensible. Todo lo que escribí o hice no tiene mucho plan realmente. Fue explosivo de mi parte querer hacer un disco”, relata en una conversación a través de videollamada.
Después del disco “Seis”, publicado el pasado abril, Monserrat Bustamante, nacida en Viña del Mar en 1983, se encontraba en un apartamento en Hollywood donde, aunque muy pocos lo sabían, se había adentrado en la búsqueda de su primer hijo.
Para ello tuvo que someterse a un tratamiento hormonal “con inyecciones incluidas” que le hizo vivir una época muy emocional en la que por momentos se sentía primero arriba y luego abajo. Por esto, dijo, hubo temas que abrió en ese periodo y, de manera casi inconsciente, decidió incluirlos en el disco.
“Hay temas que me atreví a abordar porque estaba hormonal. Yo decía que estaba bien, pero estaba para arriba y para abajo, con calores. Muchas pequeñas cositas que pasan que finalmente afectan”, detalla.
En “1940 Carmen” se tocan temas de todo tipo. Desde una canción que deriva de una discusión en un supermercado que lleva ese mismo título, hasta una oda al cambio en “Algo es mejor”, e incluso un abuso sexual cuando tenía 13 años en “A Crying Diamond”. Y todo es autobiográfico, porque la etapa que está viviendo no le permitía que fuese de otra manera.
Cinco años de abusos en una canción
“A Crying Diamond” relata de una manera directa y cruda -aunque esto se puede ver en todo el disco, con un fondo musical mucho más simplificado que en sus trabajos anteriores- un abuso que, relata la cantante, sufrió durante cinco años de su vida cuando iba empezando en el mundo de la música siendo adolescente.
“Es algo (sobre lo) que creo que nunca me habría atrevido a hacer una canción ni a contarlo, pero estaba tan ultrasensible que escribí esa canción”, relató con una sorprendente simpleza.
Y es que en el proceso con este disco, creado en medio de pura sensibilidad estimulada por un tratamiento hormonal, refleja de muchas maneras su realidad sin filtros, sin intenciones de opacar ningún asunto y sin cuestionamientos, algo que, cuenta Laferte, le está sirviendo.
“Ahora me siento increíble, estoy feliz, me siento valiente y me gusta eso. (...) Me doy cuenta que me ha servido y me sirve cantarla porque también he llevado ese peso muchos años conmigo. Y me cuesta hablarlo, me hace sentir a mí culpable. Esto es algo como escarbar un poquito de otra manera y quitarme culpas”, comparte.
La maternidad de refilón
Otro tema personal para la cantante es “Niña”, que escribió cuando todavía no estaba embarazada y en el que se puede apreciar una conexión con su niña interior, pero también las ganas de dar vida.
Sin embargo, explica que es la única canción en la que menciona la maternidad. “Creo que no quedó en el disco mi máximo miedo que era no embarazarme o perder al bebé. Tenía mucho miedo, tanto que ni siquiera quería abordar el tema en una canción. Entonces empecé a hablar de otras cosas”, confiesa.
Sin embargo, ahora se siente bien, esperando a su primer hijo, con “1940 Carmen” en el mercado y, sobre todo, en los escenarios.
Recientemente Laferte terminó una gira de 27 conciertos por Estados Unidos y en diciembre tendrá dos fechas en el icónico Teatro Metropólitan de Ciudad de México.
Además será una de las artistas que participe el próximo 18 de noviembre en los Latin Grammy -en los que cuenta con cuatro nominaciones- en Las Vegas, donde compartirá actuación con Gloria Trevi y la Arrolladora Banda el Limón.
“Lo necesitaba y me encanta cómo revivo en el escenario. Es algo que he hecho toda la vida y como que me acostumbré a tener esa adrenalina. (...) Para mí fue un reafirmar que me encanta hacer esto”, termina la chilena, quien también quiso compartir que votará desde México en las próximas e importantes elecciones presidenciales de su natal Chile el próximo 21 de noviembre.