Carlos III del Reino Unido y Enrique de Sussex. (Foto: AFP)
Carlos III del Reino Unido y Enrique de Sussex. (Foto: AFP)
Redacción Mag

Estaba cantado. Las polémicas memorias de han echado más leña al fuego de la hoguera de la realeza británica y podrían convertirse en un obstáculo para la asistencia del príncipe Enrique y Meghan de Sussex a la ceremonia de coronación del rey en mayo.

Consultado recientemente sobre si piensa asistir a la coronación de su padre, el príncipe Enrique ha dejado la puerta abierta y sembrado la duda, pero en el caso de que el rey Carlos III mantenga su invitación y él decida acudir, lo cierto es que no desempeñará ningún papel en la ceremonia.

Según el diario británico , el rey Carlos III ha decidido eliminar el papel que tradicionalmente desempeñaban en las ceremonias de coronación de los monarcas británicos aquellos hombres de su familia con el título de duque.

Enrique, eliminado del guion

“El príncipe Enrique ha sido eliminado del guion de la coronación y no tendrá un rol oficial si asiste”, adelante The Sunday Times a partir de una información procedente de una fuente de la casa real. “Rompiendo con la tradición, Carlos III prescindirá del acto en el que los duques reales se arrodillan y rinden homenaje al monarca. Solamente Guillermo desempeñará a cabo ese papel”, explican.

Lo habitual hasta ahora es que aquellos miembros de la familia real británica con el título de duque de coronación. En la de la reina Isabel II tanto su esposo, el duque de Edimburgo, como sus primos los duques de Kent y de Gloucester se arrodillaron ante ella.

El cambio introducido por rey Carlos III supondrá por lo tanto que ni su hijo el príncipe Enrique, nombrado duque de Sussex tras su boda con Meghan Markle, ni otros parientes del monarca que son duques como el príncipe Andrés, el duque de Kent y el duque de Gloucester participarán activamente en la ceremonia.

Aunque la decisión de Carlos III podría obedecer a su deseo de simplificar la ceremonia de su coronación, como hace años se dice que desea hacer, prescindir de ese papel tradicional de los duques reales le permitirá librarse del príncipe Enrique, quien ha sido una ‘piedra en el zapato’ para la realeza.


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