Un insólito plan fue el que llevó a cabo un hombre de Australia que fingió su propio secuestro para engañar a su pareja y así poder pasar la víspera de Año Nuevo con su amante; sin embargo, su plan fue descubierto y ahora enfrentará las duras consecuencias.
El pasado 31 de diciembre, Paul Iera, de 36 años y radicado en el estado de Nueva Gales del Sur, salió de su casa con la excusa de que iba a encontrarse con un “asistente financiero” en Dapto, al sur de la ciudad de Wollongong.
Una hora después, su novia recibió un mensaje de texto que decía que Paul había sido secuestrado. El escrito, que se hizo público, incluía una demanda bastante inusual.
“Vamos a ser justos. Está bien. Lo tendremos con nosotros hasta mañana, cuando nos dé su motocicleta”, decía el mensaje.
Al leer el texto, la esposa de Iera denunció un posible secuestro ante la policía, quienes actuaron de inmediato con la investigación correspondiente.
El engaño, al descubierto
Al día siguiente, el sujeto se comunicó con su padre y le dijo que lo habían liberado en la ciudad de Wollongong. Al enterarse de esto, la policía desplegó un operativo creyendo que el rehén podría estar rodeado de personas armadas, pero al llegar al sitio señalado lo encontraron solo en un vehículo.
En la escena, Iera aseguró que había sido raptado por varios hombres “desconocidos del Medio Oriente”; no obstante, su mentira duró poco ya que las autoridades pudieron revisar la grabación de una cámara de seguridad de un hotel, en donde se le podía ver junto a su amante en la noche del incidente.
Luego de que el engaño fuera expuesto, se determinó que Iera no irá a la cárcel, pero tendrá que pagar 16 mil dólares australianos (10 mil dólares estadounidenses) por los costes de la investigación y el operativo llevado a cabo por la policía. Asimismo, tendrá que realizar 350 horas de servicio comunitario.
Licenciado en periodismo en la Universidad de San Martín de Porres. Cuatro años de experiencia generando contenido de actualidad, cultural y tendencias para medios de comunicación de alcance masivo. Actualmente se desempeña como redactor en el Núcleo de Audiencias del Grupo El Comercio.
