Una mujer de Inglaterra se sometió a un largo y agotador tratamiento contra el cáncer; sin embargo, dos años después de iniciado el proceso supo que su diagnóstico era erróneo y que nunca padeció la mencionada enfermedad.
Megan Royle, de Beverley, atravesó nueve rondas de inmunoterapia y una cirugía luego de que los médicos del NHS (Servicio Nacional de Salud del Reino Unido) le detectaran cáncer de piel en 2019.
La maquilladora teatral, que por entonces tenía 29 años y vivía en Londres, también se sometió a un tratamiento de fertilidad que le permitiera congelar sus óvulos, ya que siempre soñó con convertirse en madre.
Lamentablemente, el error no se descubrió hasta dos años después, en 2021, una vez que Royle, ahora de 33, se mudó al norte y el nuevo personal que la atendió recibió su información médica. Tras revisar su historia, confirmaron que la joven había sido mal diagnosticada y que jamás estuvo enferma.
“Realmente no se puede creer que algo como esto pueda suceder”, dijo la inglesa según consignó el medio Daily Mail. “Y hasta el día de hoy no he tenido una explicación de cómo y por qué sucedió. Pasé dos años creyendo que tenía cáncer, pasé por todo el tratamiento y luego me dijeron que no había ningún cáncer”.
Diagnosticada erróneamente con cáncer
En 2019, su médico de cabecera la remitió por primera vez a una revisión dermatológica en Chelsea and Westminster Hospital tras detectar un lunar en su brazo que había aumentado de tamaño, le picaba y formaba costras.
Tras una biopsia, se le dijo que tenía melanoma, el tipo de cáncer de piel más mortal. Luego la derivaron a la unidad especializada en cáncer del Royal Marsden Hospital y su diagnóstico fue confirmado nuevamente.
Después de someterse a un corte de tejido de 2 cm de ancho para eliminar el supuesto cáncer, atravesó nueve inmunoterapias hasta mayo de 2021.
Cuando le dijeron que ya no tenía signos de la enfermedad, se mudó al norte en mayo de 2021 porque la pandemia le impedía trabajar en el teatro.
Poco tiempo después, y tras ser recibida por el nuevo personal médico, le dijeron que su diagnóstico había sido equivocado.
“Uno pensaría que la emoción inmediata sería alivio, y en cierto sentido lo fue, pero yo diría que las emociones más importantes fueron frustración y enojo”, recordó la mujer.
Tras el hecho, Royle decidió demandar la negligencia médica cometida por los servicios hospitalarios del Reino Unido y, tras un acuerdo extrajudicial, llegaron a un acuerdo por el que recibió una compensación.
Un portavoz de The Royal Marsden NHS Foundation Trust declaró: “Deseamos ofrecer nuestras más sinceras disculpas a Megan Royle por la angustia causada por su experiencia en nuestro fideicomiso y nos complace que se haya llegado a un acuerdo”.
¿Cómo se diagnostica el cáncer?
El diagnóstico del cáncer generalmente implica una combinación de procedimientos médicos y pruebas. El primer paso suele ser una evaluación clínica por parte de un médico, que incluye la revisión de la historia médica del paciente y un examen físico. A menudo, se utilizan pruebas de imágenes, como radiografías, tomografías computarizadas (TC) o resonancias magnéticas (RM), para detectar la presencia de tumores.
También se pueden realizar análisis de sangre para buscar marcadores tumorales. Sin embargo, el diagnóstico definitivo suele requerir una biopsia, que implica tomar una muestra del tejido sospechoso y examinarla bajo el microscopio para determinar si contiene células cancerosas. Una vez que se confirma el diagnóstico de cáncer, se realiza una estadificación para determinar la extensión de la enfermedad y guiar el tratamiento.
Licenciado en periodismo en la Universidad de San Martín de Porres. Cuatro años de experiencia generando contenido de actualidad, cultural y tendencias para medios de comunicación de alcance masivo. Actualmente se desempeña como redactor en el Núcleo de Audiencias del Grupo El Comercio.