Leandro y Vanesa quizás protagonizan una de las historias más curiosas o extrañas del Mundial Qatar 2022. Y no es para menos, pues, la pareja argentina gastó todo el dinero que tenía para llegar al país de Medio Oriente y seguir de cerca a la selección de Lionel Messi. El insólito caso ya se viralizó en las redes sociales.
La locura nació a raíz de la derrota del conjunto ‘albiceleste’ ante Arabia Saudita por la primera jornada de Qatar 2022. Tras el pitazo final, Leandro Valdez y Vanesa decidieron viajar al territorio qatarí.
“Estábamos en Uruguay por una cuestión de trabajo. Argentina terminaba de perder el primer partido contra Arabia Saudita. Y ahí fue que dijimos: ‘Tenemos que ir, como sea pero tenemos que ir’”, comenzó diciendo Leandro.
Vendieron su coche
Según contó el padre de Valentín y Paz, “no disponíamos de grandes ahorros”. Por eso mismo, ambos tuvieron la ingeniosa idea de “vender un vehículo, un auto familiar para poder” ir a la máxima fiesta del fútbol.
“Un Chevrolet Prisma 2014, familiar, sencillo nos sirvió para costear los gastos del avión. Por suerte lo vendimos bien”, agregó el aficionado. Una vez que recibieron el dinero, compraron los boletos de Buenos Aires a Madrid para luego tomar el avión hacia Doha.
“Nos quedamos hasta la final”
Si bien no cuentan con mucho dinero, los protagonistas dormirán durante en un departamento junto a unos muchachos de Córdoba. “Nos quedamos hasta la final. Los conocimos a través de un grupo de WhatsApp, muy macanudos. Lo otro que no sé es cómo vamos a hacer con las entradas. Haré alguna changa, no sé. Maradona y Messi abren muchísimas puertas, hoy lo único que importa es estar acá”, le confesó Valdez a Todo Noticias.
El generosidad de una mujer qatarí
Ahí no acaba la increíble historia, pues la familia pasó algunas horas en el Mall of Qatar. Mientras recorrían el inmenso centro comercial, encontraron a una mujer qatarí.
“Estábamos charlando con ella, le contamos lo que hicimos para llegar hasta acá y se emocionó hasta las lágrimas. En un momento se fue y al rato regresó con un peluche para la bebé. Tenía una etiqueta que decía ‘180 dólares’. Lo compró ahí”, reveló el hombre que trabaja en el sector rural.