Qatar es la sede de la Copa del Mundo 2022 y su elección hecha en 2010 y hasta nuestros días siguen causando muchas interrogantes, entre otras por lo que la comunidad internacional califica como “constantes violaciones a los derechos humanos” tanto a las mujeres como a la comunidad LGTBIQ, pero muy pocos saben cómo es que este pequeño emirato se alzó como una nación soberana, además de convertirse en unas pocas décadas en uno de los países más ricos del planeta.
Qatar, un pequeño país en el Golfo
Qatar es un país es un país pequeño ubicado en el Golfo Pérsico cuya superficie es menor a, por ejemplo, El Salvador, pero que siempre ha tenido grandes ambiciones que hoy se ven reflejadas en su riqueza.
Sin embargo, es un país particular, pues el 99 por ciento de su población vive en una sola ciudad, la capital Doha, cosa que asombraría a los antepasados de este pueblo quienes eran tribus beduinas nómadas.
Breve historia de Qatar
La posición de este emirato siempre fue estratégica, pues representó un foco importante de expansión del islam en el siglo VI, mientras que en el siglo XVI fue conquistada por el Imperio Otomano, pero también generó interés una de las potencias marítimas de esos años: Portugal.
Sin embargo, los orígenes de esta nación surgen cuando llegó la familia Khalifah proveniente Kuwait en el 1766, pero en 1783 dejarían la zona para conquistar el actual Bahréin. Ante esto, aparece la figura Mohamed Ibn Thani quien se dio a la labor de unificar a las tribus, pero en 1867 iniciaría una guerra entre los jeques de Qatar y Bahréin por el control de la región, pero, entonces, el Imperio Británico aprovecharía el conflicto para reforzar su presencia en el Golfo Pérsico.
Cuando acabó la Primera Guerra Mundial (1914-1918) y la disolución del Imperio Otomano fue un hecho, los británicos se hicieron con el control de toda esta región hasta 1971 cuando Qatar, finalmente, proclama su independencia.
Qatar, de la pobreza a la riqueza
Qatar no siempre fue un país rico, de hecho, antes de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) era considerada como una nación pobre, pero el descubrimiento de yacimientos de petróleo en 1939 les cambiaría la vida (comenzarían su explotación 10 años después). Sumado a esto, en la década de 1990 empezarían a explotar sus reservas de gas natural.
La abundancia económica de Qatar posibilitó la llegada de inmensas olas de trabajadores, principalmente del sudeste asiático, al punto que hoy, de los 3 millones de habitantes del emirato, solo el 15 por ciento son qatarís, mientras que las mujeres son el 25 por ciento de la misma.
Pero, esto dista de hacer a la nación árabe un destino paradisiaco pues, por ejemplo, solo en la construcción de los escenarios para el Mundial, organizaciones internacionales revelan que miles han muerto por accidentes, por calor o agotamiento por los durísimos regímenes de trabajo.
La religión y los derechos humanos
La religión es un tema vital en Qatar, pues la ley islámica (la sharía) es la principal fuente de derecho, de hecho, el wahabismo, que es una de las ramas más conservadoras de esta fe, es la que rige la vida de la nación.
Estas normas vienen con una serie de restricciones paras las mujeres, pues el sexo fuera del matrimonio está tipificado como delito y se castiga con 7 años de prisión, además de 100 latigazos. Sin embargo, en comparación con otros países árabes, Qatar es el país donde la población femenina es la que tiene mayor acceso a la educación, así como un importante número de trabajadoras.
Otro punto de gran controversia son las restricciones con la comunidad LGTBIQ, pues en este país la homosexualidad es ilegal y se castiga con la cárcel.