Desde octubre de 2013, Thor Pedersen ha realizado la aventura de su vida: visitar todos los países del mundo sin tomar un solo vuelo de avión. El danés pensó que acabaría su recorrido en 4 años, pero jamás imaginó que demoraría 6 más en completar su objetivo, por lo que su relato de inmediato se hizo viral.
La historia de nuestro protagonista inicia en su natal Dinamarca cuando renunció a su trabajo en envíos y logística para comenzar su aventura, pero se dio con la sorpresa que Le, su esposa, no sería su compañera de viaje, por lo que calculó que cumpliría su meta en 2017 si pasaba un promedio de 7 días por cada país visitado.
Pero en su recorrido se presentaron más de un problema, principalmente con las visas, además de la pandemia del coronavirus que hizo que permaneciera dos años en Hong Kong, pero fue en mayo pasado cuando culminó su épico recorrido teniendo como última parada las Maldivas, a la cual llegó montado en un buque portacontenedores.
Quiere hacer historia
Al ser entrevistado por el Daily Mail, el danés reveló sus intenciones: “me enteré de que nadie en la historia ha ido a todos los países sin volar y estaba atrapado en que podría tener mi oportunidad de hacer algo... la idea era hacerlo con el transporte público siempre que fuera posible, lo que significa cientos de autobuses, trenes y transbordadores, luego preguntas si puedes subirte al barco de pesca de alguien o a un barco de contenedores”.
E insistió: “mucho del tiempo lo pasé en autobuses, trenes. El viaje en autobús más largo ha sido de 54 horas en Brasil. El viaje en tren más largo fue de cinco días en Rusia. Disfruté 27 días en barco, me dio tiempo para leer, hacer ejercicios, ver ballenas”.
¿Cómo se financian sus viajes?
Pero ¿Cómo solventó sus viajes? Pues de dos formas: por una compañía de energía y con aportes por Internet. De hecho, cuando en octubre emprendió su aventura, tan solo llevaba un año de relación con Le, quien en los 10 años de travesía salió a verlo unas 27 veces y su ansiado reencuentro en Dinamarca será en julio de este año.
Lo que no le gustó tras 10 años viajando
Sin embargo, pese a estar feliz de cumplir su objetivo, hay cierta desazón cuando reflexiona sobre esta última década: “antes de irme, mi padre estaba preocupado por mi carrera. No pensó que volvería a trabajar o que me tomarían en serio, pero lo aceptó... decirle a mi mamá que iba a ir era como decirle que voy al dentista. Estaba orgullosa. Hay arrepentimiento de no pasar más tiempo con ellos”.
Pero, también es consciente de que, probablemente, perdió la oportunidad de formar una familia con Le: “no quería interponerse en mi camino, pero estaba en conflicto porque preferiría construir una vida conmigo, despertarse a mi lado y tomar mi mano. Es un gran apoyo, hemos tenido experiencias únicas juntos en todo el mundo”.
Pero: “cada vez que venía a visitarme, se hacía más difícil, dejarla en el aeropuerto me arrancaba el corazón... Odio volver a un hotel donde nos quedamos y ser el único en la habitación o caminar por una calle donde antes caminamos. Fue muy duro. Puede que sea tarde para formar una familia... estamos empujando al límite de la biología”, confesó con pesar el hombre de hoy 44 años.
Deseoso de volver a su amada Dinamarca
Ahora, pensando en el retorno, este podría tardar alrededor de un mes pues. Pese a culminar su periplo, está decidido a no subirse a un avión ¿Qué hará de vuelta a casa? Algo que tiene claro es no regresar a su carrera anterior, en su lugar, lo apasiona la idea de escribir un libro narrando sus aventuras.
“Tengo que decir que Dinamarca es mi país favorito porque es donde pertenezco... hablo el idioma, mis padres están allí y sé que no debo preocuparme por las arañas, las serpientes, lo sé todo, por lo que se convierte en un país bastante bueno para mí”, sentenció.