Al igual que muchos, Rocío Barberá, una mujer de 32 años de Godoy Cruz, Argentina, vivió una de las peores pesadillas en 2021. La pandemia de covid-19 se llevó no solo a sus padres, sino también a su único hijo. Pese a ello, se levantó y logró salir adelante, así obtuvo su título de profesora de Matemáticas. Su historia ha conmovido en el país vecino luego que los medios locales la dieran a conocer.
En abril de 2019, en plena segunda ola, Adriana, la madre de Rocío, contrajo covid-19. Fue internada en la Clínica de Cuyo. Lamentablemente, falleció un mes después. Algunos días después, Daniel, su padre, también fue víctima del coronavirus.
Como si lo anterior no fuera suficiente, la joven perdió en noviembre a Valentino, su único hijo de 12 años, quien sufría encefalopatía crónica no evolutiva desde su nacimiento. Se descompensó y perdió la vida el 11 de ese mes por un paro cardiaco.
“Quedé sola”
“De vivir con ellos tres, que eran mi razón de existir, quedé sola. Fueron tres golpes muy duros, difíciles de sobrellevar: sentí que ya no tenía por quién seguir luchando”, dijo Rocío en conversación con el medio Los Andes. Pese al tremendo dolor que le dejó el haber perdido a sus seres amados, decidió seguir con su vida y retomar la carrera que había dejado inconclusa.
“Siempre había soñado con salir del examen y abrazar a mis padres, agradecerles y darles la alegría de la meta cumplida. Ellos fueron pilares fundamentales para que pudiera criar a Valentino, que sufría múltiples dificultades. No se me dio, pero en cambio estuvieron mis hermanos, sobrinos y amigos de fierro que supieron apoyarme desde el primer momento”, recuerda.
Mirar al futuro, con optimismo
Un mes después de haber aprobado el último examen de su carrera de profesora de Matemáticas, rinde homenaje a sus familiares fallecidos recordándolos. “Lo hice por ellos”, asegura.
Ahora, mira al futuro con optimismo. “Ya con el título en la mano me proyecto buscando trabajo en el ámbito educativo, aunque también incursionaré en programación, algo que me apasiona. Mientras tanto, hasta acomodarme, continúo ganándome la vida en un local de ropa”.
Rocío aún sigue de duelo por la pérdida de sus familiares; sin embargo, haberse convertido en profesional la motiva a continuar con su vida.
“Sigo mirando al futuro en honor a mis padres que me dieron la vida y a mi hijo que me regaló 12 hermosos años”, concluye.
¿Qué es el COVID-19?
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad por coronavirus (COVID‑19) es una enfermedad infecciosa provocada por el virus SARS-CoV-2. La mayoría de las personas que padecen COVID‑19 sufren síntomas de intensidad leve a moderada y se recuperan sin necesidad de tratamientos especiales. Sin embargo, algunas personas desarrollan casos graves y necesitan atención médica.
¿Cómo se propaga el COVID-19?
El virus puede propagarse desde la boca o la nariz de una persona infectada en forma de pequeñas partículas líquidas que expulsa cuando tose, estornuda, habla, canta o respira. Estas partículas pueden ser desde pequeños aerosoles hasta gotitas respiratorias más grandes.
Puedes contagiarte de COVID‑19 si respiras cerca de una persona infectada o si tocas una superficie contaminada y, seguidamente, te tocas los ojos, la nariz o la boca. El virus se propaga más fácilmente en espacios interiores o en aglomeraciones de personas, informa OMS.
Síntomas del COVID-19
La COVID-19 afecta de distintas maneras en función de cada persona. La mayoría de las personas que se contagian presentan síntomas de intensidad leve o moderada, y se recuperan sin necesidad de hospitalización. De acuerdo a OMS, los síntomas más habituales son los siguientes:
- Fiebre
- Tos
- Cansancio
- Pérdida del gusto o del olfato
Los síntomas menos habituales son los siguientes:
- Dolor de garganta
- Dolor de cabeza
- Molestias y dolores
- Diarrea
- Erupción cutánea o pérdida del color de los dedos de las manos o los pies
- Ojos rojos o irritados
Efectos secundarios de la vacuna contra COVID-19
La mayoría de los efectos secundarios de la vacuna contra la COVID-19 son leves, no deberían durar más de algunos días y son:
- Dolor o inflamación en la zona de la inyección.
- Fiebre.
- Escalofríos.
- Cansancio.
- Dolor de cabeza.
- Dolor muscular.
- Naúseas.
¿Qué ocurre a las personas que contraen la COVID-19?
Entre las personas que desarrollan síntomas, la mayoría (alrededor del 80%) se recuperan de la enfermedad sin necesidad de recibir tratamiento hospitalario. Alrededor del 15% desarrollan una enfermedad grave y requieren oxígeno y el 5% llegan a un estado crítico y precisan cuidados intensivos, precisa OMS.
Entre las complicaciones que pueden llevar a la muerte se encuentran la insuficiencia respiratoria, el síndrome de dificultad respiratoria aguda, la septicemia y el choque septicémico, la tromboembolia y/o la insuficiencia multiorgánica, incluidas las lesiones cardíacas, hepáticas y renales. Rara vez, los niños pueden manifestar un síndrome inflamatorio grave unas semanas después de la infección.
¿Qué hacer si tengo COVID-19 Omicron?
De acuerdo a gestion.pe, durante 10 días después de tu último contacto cercano con alguien con COVID-19, debes estar atento a la aparición de fiebre, tos, dificultad para respirar u otros síntomas de COVID-19. Si presentas síntomas, debes hacerte una prueba de detección de inmediato y aislarte hasta recibir los resultados de la prueba.