Las papas gratinadas es un plato exquisito y el acompañante perfecto de todo tipo de carnes, y es que las papas son unos de los productos más versátiles de la cocina, ya que se pueden preparar de una infinidad de maneras. Y lo mejor no es solo esto, sino que, además, son un alimento bastante económico. Prueba esta receta tradicional de papas gratinadas al horno para tu almuerzo o cena.
Ingredientes
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- 1.5 kilos de papas
- Sal al gusto
- 1/2 barrita (45 gramos) de mantequilla
- 1 taza de crema
- Chile en polvo, al gusto
- 1/2 cucharadita de tomillo en polvo
- 1/2 cucharadita de romero en polvo
- 1/2 taza de queso adobera o manchego rallado
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Preparación
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1. Hierve las papas en una olla grande con agua y sal, hasta se hayan ablandado, pero aún estén firmes, cerca de 15 minutos. Déjalas enfriar un poco y córtalas en rebanadas delgadas.
2. Engrasa con mantequilla un refractario rectangular y unta sobre la base una capa de crema, cubre la crema con rebanadas de papa y espolvoréalas con sal, chile en polvo, tomillo y romero. Agrega crema encima y luego queso. Repite el procedimiento de capas hasta terminar con una última capa de queso.
3. Hornea a 200 ºC hasta que el queso se haya gratinado y dorado ligeramente, cerca de 15 minutos.
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Ficha
Tiempo total: 45 minutos
Tiempo preparación: 30 minutos
Porciones: 6
TRUCOS DE COCINA QUE TE AYUDARÁN A AHORRAR
Evita las verduras ya cortadas
Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.
Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos
Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.
Haz caldos
No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.
Busca productos de temporada
El sentido común es básico a la hora de hacer las compras y pensar en el menú de la semana o el mes. Si somos de ir al mercado será fácil saber qué está de temporada porque será lo más económico. A partir de ahí, sólo hay que pensar qué cocinar con eso que hemos comprado a buen precio en el supermercado.
Cortes de carne más baratos
Ser carnívoro también es compatible con ahorrar. Es más cuestión de saber comprar que de saber cocinar y tener claro que no siempre los cortes más caros son los más exquisitos. ¿Has probado los contramuslos de pollo? Mucho más barato y sabrosos para, por ejemplo, acompañar con un cremoso puré de papas.