En un mercado laboral bastante competitivo como el de hoy en día, aprender a “venderse” como profesional es una habilidad muy positiva. Sin embargo, a algunas personas las entrevistas de trabajo les pueden generar muchos nervios y ansiedad. Si has llegado hasta este punto, significa que tu CV ha destacado sobre los otros, por lo tanto es tu oportunidad para dar lo mejor de ti. Así que hoy conocerás unos consejos para olvidarte de esos nervios y ansiedad que te invaden antes de un evento tan importante para tu futuro laboral.
En cada entrevista de trabajo, los reclutadores podrán hacerte algunas preguntas que más allá de que sean difíciles de contestar, invitan a generar una reflexión y son importantes para conocerte mejor.
Ten por seguro, que eres lo suficientemente capaz de atravesar esta etapa. Por ello, hoy en Mag te traemos algunos consejos que pueden ayudarte a reducir tus nervios en esta fase tan importante:
Acude bien preparado
Acudir a una entrevista de trabajo sin antes haberla preparado mínimamente es como acudir a un examen importante sin estudiar. Por eso, este es el primero de una lista de consejos que ayudarán a eliminar, o al menos reducir, los nervios y la ansiedad que puede provocar una cita tan importante.
Conoce más sobre la empresa, así como el puesto al cual te postulaste. Puedes visitar su web o redes sociales para saber a qué se dedican, cuál es su filosofía, qué opinan sus propios empleados. Esto es de gran ayuda para unir tus ideas con la cultura organizacional del lugar, además de que muestras interés.
Recrea algunos escenarios
Piensa en algunos escenarios que podrían ocurrir durante tu entrevista. Resume y jerarquiza de manera adecuada todos tus logros profesionales y personales. Recuerda “conectar” tus habilidades con las que busca el puesto. Así como posibles respuestas a las preguntas más comunes de este proceso.
Ensaya tu entrevista
Practica algunas de tus respuestas frente al espejo o incluso grabándote puede ser una buena manera de reducir los nervios. Es fundamental que lo hagas en voz alta, pues así verbalizas de manera correcta tus ideas. Pese a ello, ten siempre en cuenta que lo más importante de una entrevista de trabajo es que todo surja de manera natural, recuerda que solamente tu te conoces a la perfección.
Duerme bien la noche anterior
Duerme y descansa todo lo posible la noche antes de la entrevista. Asimismo realizar ejercicio te puede ayudar a disminuir tus niveles de estrés y con ello controlar tus nervios para el día D.
Llega 5 minutos antes
Ya sea que tu entrevista sea de manera remota o presencial, te recomendamos estar unos minutos antes en el espacio y hora indicada, pues así podrás controlar factores externos que podrían afectar tu llegada a la entrevista. Si algún contratiempo te ha pasado, contacta inmediatamente a tu entrevistador para comentarle sobre tu demora o incluso poder agendar en otra hora o día.
Meditación y respiración
Minutos antes de la entrevista, práctica algunas técnicas de relajación. Puedes inhalar, retener y exhalar aire, tomar un poco de agua, ir al baño, escuchar tu música favorita, disfrutar de un caramelo o simplemente pensar en algo positivo que te haya pasado recientemente. Ve tranquilo al encuentro.
Controla las muletillas
Las muletillas no son más que aquellas pequeñas palabras innecesarias que llenan los espacios en una conversación, por ejemplo “estee” “ummm” y son una muestra de nerviosismo. Tómate unos segundos para pensar tu respuesta, estas pausas te muestran más seguro y con ello evitas que tu discurso se convierta en algo poco atractivo.
Controla tu lenguaje corporal
Estás interactuando con otra persona y tu lenguaje corporal habla mucho de eso. Sonríe de manera natural, mantén contacto visual con el entrevistador, usa tus manos para gesticular y lo más importante disfruta y aprende del proceso.
Confía en ti y piensa que si has llegado hasta acá es porque tu perfil les ha interesado. Si luego de tu entrevista no eres seleccionado, no te desanimes y sigue intentando, procura obtener retroalimentación para saber los aspectos en los que puedes mejorar y aquellos que debes mantener.