Algunas organizaciones, con el propósito de alinear a sus trabajadores en la forma cómo deben comportarse dentro de sus oficinas, crean reglas en su intento de generar orden o detener el accionar extravagante de alguno de ellos.
Sin embargo, en lugar de buscar o mantener el buen comportamiento, lo único que provocan es molestia, pues muchas de las normas que se establecen no favorecen el clima dentro de la empresa.
Y aunque en la mayoría de los casos, debe ser el jefe la persona designada para poner su autoridad y marcar las pautas dentro de una empresa, solo piensan y están seguros de que lo dictaminado solucionará algunos inconvenientes que se estén presentando, pero no siempre es así.
A continuación, el portal Entrepreneur hizo una recopilación de las reglas que pueden volver loco a cualquiera.
1. EVALUACIONES ESTANDARIZADAS Y DE RENDIMIENTO
A pesar de que con esta regla se busca que los colaboradores se esfuercen más en lo que hacen al estar en constante evaluación, lo único que se logra es obligarlos a encajar en un sistema de clasificación predeterminado que no toma en cuenta sus intereses o aspiraciones.
Si haces esto sin tomar en cuenta que cada persona es totalmente distinta a la otra, lo único que conseguirás son tres cosas: evaluar de forma incorrecta el rendimiento de los trabajadores, hacer que todos se sientan como un número y crear inseguridad e insatisfacción, pues sentirán que podrían ser despedidos si no cumplen tus expectativas.
2. REQUISITOS PARA PERMISOS Y SUSTENTAR ENFERMEDAD
“Se les paga a los empleados por el trabajo que desempeñan, no por las horas que se sientan en sus escritorios”, se lee en Entrepreneur. Es decir, cuando se sanciona por llegar cinco minutos tarde a un empleado que siempre se queda más tiempo de su hora o te contesta el teléfono su día de descanso, crea un sin sabor y desconfianza en ellos.
Asimismo, cuando las organizaciones son estrictas al momento de pedir una licencia médica o en una situación de duelo, los trabajadores se sentirán maltratados y que son catalogados de mentirosos, pues supuestamente los hacen ver como si estuvieran inventando un descanso.
3. RESTRINGIR EL USO DE INTERNET
Aunque hay lugares de una compañía que requieren que nadie visite a través de la red, esto no debería aplicarse a toda la empresa. Una vez que se haya bloqueado las páginas prohibidas, lo recomendable es que las máquinas de los empleados tengan acceso a internet para que puedan despejar su mente en momentos de descanso.
Si una organización bloquea acceso, como por ejemplo a Facebook, lo que se logra es desmoralizarlos y decirles qué cosa deben y qué no hacer.
4. PROHIBIR CELULARES
Para nadie es un secreto de que hay trabajadores que pasan más tiempo de lo debido revisando su celular, y aunque una de las acciones a tomarse es restringir su uso en toda la oficina, lo único que se conseguirá es hacer sentir mal a aquellos colaboradores que sí cumplen con sus funciones y se verán perjudicados.
Inocentes no deben pagar por culpables, por lo que prohibir a todos llevar sus equipos es una mala decisión e incluso considerada descabellada. Todos necesitan revisar su celular para estar al tanto de sus familiares o estado de salud de alguien o verlo cuando tenga un pequeño descanso.
5. POLÍTICAS SEVERAS PARA USAR EL CORREO ELECTRÓNICO
Es una de las nuevas reglas que está siendo calificada de inapropiada. En algunas organizaciones, que dicen llamarse estrictas, se le pide a su personal seleccionar temas de una lista pre aprobada antes de que el software de correo le permita enviar cualquier mensaje.
De aplicarse ella, lo único que se demuestra es la desconfianza que tiene el empleador con el resto de sus trabajadores. Entonces, sería bueno preguntarle al jefe: ¿por qué contrató a ese tipo de personas que tanto desconfía?
6. ROBAR PUNTOS DE VIAJERO DE LOS EMPLEADOS
Los viajes que realizan los empleados cuando cumplen una labor de la empresa en otro lugar, podrían ser recompensados por los puntos que ganen con ellos como viajero frecuente; sin embargo, algunas empresas hacen que esto no sea así y se les prohíbe tener dicha ventaja haciendo que el resentimiento invada al colaborador.
Lo peor de todo es que algunos jefes toman los puntos de viajero de sus trabajadores para obtener beneficios personales, sin tomar en cuenta que ellos serán quienes viajarán a cumplir una labor.
7. RESTRINGIR LA AUTOEXPRESIÓN
Algunas empresas están tan obsesionadas en mantener el orden dentro de cada oficina que observan quiénes colocan un póster o adorno en sus escritorios, incluso se les dice cuántos accesorios como máximo deben tener.
Lo mismo ocurre con la vestimenta de los trabajadores, muchas veces se dice qué ropa usar, de qué color y hasta qué altura. Para los colegios puede resultar, pero no para un centro laboral. Si alguien cruza la línea, la persona encargada deberá conversar a solas con su empleado para hacerle saber ciertas normas, pero no imponerlo a todos.