Quizás pienses que freír unas papas no tiene ningún secreto, sin embargo existe una técnica que te ayudará a conseguir que te queden crujientes por fuera y tiernas por dentro. Con este truco no muy conocido por la gente conseguirás la textura y el sabor deseados. Ni muy cocidas, ni demasiado aceitosas, en su punto exacto. Disfruta de este plato favorito por grandes y chicos.
LEER MÁS: Cómo hacer papas fritas de bolsa en microondasLas papas fritas pueden consumirse solas o aderezadas con kétchup, mayonesa u otras salsas como la mostaza. De esta forma se suelen servir como acompañante de las hamburguesas e incluso con platos fuertes como chuletas de cerdo, albóndigas, pollo frito, barbacoa, etc.
Origen de las papas fritas
El origen de la papa frita cortada en forma de bastón está disputado entre Bélgica y Francia, pero es sólo en el primero donde se considera una comida típica. Los franceses se adjudican la invención del plato; se dice que a fines del siglo XVIII sobre el Pont Neuf de París se instalaban los vendedores de esta delicia, que preparaban a la vista de sus clientes dentro de braseros y sartenes. Los belgas la cocinan en dos etapas: en aceite y con grasa; los franceses sólo en aceite.
Las papas fritas tipo chips, es decir, las que están cortadas en forma redonda y delgada, surgieron en un restaurante llamado Moon Lake Lodge’s, en Saratoga Springs, Nueva York, en 1853. El chef de dicho restaurante, George Crum, ante las continuas quejas de un cliente habitual que siempre lo recriminaba por no cortar las papas fritas lo suficientemente finas, decidió darle una lección cortándolas excesivamente delgadas, de manera que no pudieran pincharse con el tenedor. El resultado fue todo lo contrario al esperado, el cliente quedó sorprendido y completamente satisfecho. Pronto todos los clientes empezaron a pedir aquella nueva y extraña especialidad, a la que bautizaron como Saratoga Chips.
Calorías de las papas fritas
Las papas fritas aportan un promedio de 380-400 calorías por 100 gramos, dependiendo de su tamaño. Una porción de papas fritas contiene 22 gramos de grasa y 57 gramos de hidratos de carbono. Una porción promedio de papas fritas asciende a los 200 gramos, aportando 760 calorías.
Por otra parte, 100 gramos de papas fritas hechas con aire caliente y una sola cucharada de aceite (15 gramos) por cada 500 g de papas tienen un poco más de 100 calorías (77 calorías de 100 gramos de papa más 26 calorías de 3 gramos de aceite).
Propiedades adictivas de las papas fritas
Según científicos alemanes que estudiaron el patrón de actividad que desencadena este alimento en el cerebro en ratas de laboratorio, el consumo de papas fritas resulta irresistible no solo por su contenido en grasa y carbohidratos, sino también por una mayor activación de regiones del cerebro relacionadas con el sistema de recompensa, la ingesta de comida, el sueño y las áreas motoras. Se desconoce aún qué sustancia es la que provoca tal respuesta.
El truco para conseguir papas fritas crujientes
Lo primero es cortar las papas a tiras y colocarlas en un bowl con sal. Removerlas y dejar reposar unos 10-15 minutos. Si cumplimos este paso, conseguiremos que absorban la sal como es debido. Cuando haya pasado el tiempo indicado deberemos retirar del bowl el agua que hayan soltado las papas tras el sazonado.
El siguiente paso es poner el aceite a calentar y esperar a que esté tibio para echar las papas. Debemos cocinarlas durante 7-8 minutos y luego retirarlas del fuego para colocarlas en un plato cubiertas con papel platino. Así conseguiremos que acaben de cocinarse por dentro y que queden tiernas.
A continuación hay que aplastar las papas para que se abran y así conseguir que nos queden más crujientes. Las echamos al fuego, las dejamos un minuto y listo. Al servirlas en un plato se les puede echar más sal, pero gracias al sazonado que hemos hecho previamente no será necesario.