Independientemente de su calidad, no hay pareja que no tenga conflictos. Todas las personas son distintas y a veces discutimos sobre cosas que pueden parecer insignificantes. Sin embargo, cuando usamos frases que no son constructivas y pueden dañar la relación, surge el problema. Basándome en el consejo de terapeutas especializados en relaciones, hoy en Mag te diré cuáles son esas siete frases que es mejor evitar durante una conversación.
1. “Te pareces a tu mamá”
Según Winifred M. Reilly, terapeuta matrimonial y familiar, comparar a la pareja con su madre, su padre o cualquier familiar con el que tenga un conflicto puede desviar la atención del problema real y atacar directamente su autoestima. Las comparaciones nunca son una buena idea, especialmente en medio de una discusión. Estas frases tienden a aumentar la tensión y dificultan la resolución del conflicto.
2. “¡No se puede hablar contigo! ¡Me voy!”
Amenazar con irse durante una discusión puede empeorar la situación. Sheri Meyers, terapeuta matrimonial, sugiere que en lugar de lanzar una amenaza de marcha, es más útil tomarse un respiro. “En lugar de gritar, tómate un tiempo para calmarte, centrarte y restablecer el equilibrio”, aconseja Meyers. Este enfoque permite que ambos se calmen y aborden el conflicto de manera más racional.
3. “Siempre...” o “Nunca...”
El uso de frases extremas como “siempre me ignoras” o “nunca estás de acuerdo conmigo” suele ser contraproducente. Estas generalizaciones reflejan extremos y suelen ser exageradas. Tara Griffith, terapeuta matrimonial y familiar, recomienda ser específico y objetivo sobre lo que te molesta. “Debes apegarte a los hechos y evitar exageraciones”, señala Griffith. Las afirmaciones generales suelen hacer que la otra persona se ponga a la defensiva, lo que puede intensificar el conflicto.
4. “Cuando seas razonable te hablo”
Decirle a tu pareja que solo hablarás cuando ella sea razonable puede causar un daño emocional significativo. No solo estás invalidando lo que ha dicho, sino que también estás evitando el problema real. Steven Stosny, psicólogo, sugiere que lo más adecuado es pedir un breve descanso para calmarse y luego abordar la conversación con tranquilidad. “Cuando las discusiones se intensifican, es una buena idea dejar que el cortisol y la adrenalina se asienten durante unos 20 minutos”, afirma Stosny.
5. “Estás haciendo escándalo por nada”
Decir que alguien está exagerando durante una discusión es como echarle gasolina al fuego. Cuando estamos molestos, queremos ser escuchados y comprendidos, no minimizados. Este tipo de comentarios solo aumenta la frustración y puede hacer que el conflicto se agrave aún más.
6. “¡Eres un(a) #@?”&!”
El uso de lenguaje insultante y degradante solo contribuye a herir profundamente a la otra persona. Gina Delucca, psicóloga clínica, enfatiza que “no hay nada constructivo en los insultos o el uso de cualquier tipo de lenguaje degradante o despectivo”. En lugar de insultar, es crucial centrarse en el tema de la discusión y tratar de resolver el conflicto de manera respetuosa.
7. “¿¡Otra vez con lo mismo!? "
Si alguna vez has escuchado esta frase, sabes lo doloroso que puede ser. Decirle a tu pareja que está repitiendo lo mismo puede hacerle sentir que no estás dispuesto a escuchar. Mantener una actitud abierta y receptiva es esencial para resolver cualquier conflicto. Mostrar empatía y disposición para escuchar puede mejorar la calidad de la comunicación y ayudar a resolver los problemas de manera más efectiva.