Una persona cocinando pasta. | Imagen referencial: Freepik
Una persona cocinando pasta. | Imagen referencial: Freepik
Rodolfo Huamán

Si eres anfitrión y no sabes qué cocinar, la es un plato muy recurrido por la sencillez y rapidez que demanda prepararlo, a fin de evitarnos complicarnos mucho la vida. Sin embargo, hay ciertas técnicas y que se deben seguir para que te quede perfecto y así puedas sorprender a tus invitados.

Como se sabe, la pasta es un alimento cuyo ingrediente básico es la harina de trigo, mezclada con agua, y a la cual se puede añadir sal, huevo u otros ingredientes. Está incluido en la mayoría de dietas por las propiedades que tiene y es fácil de cocinar.

Ahora bien, si ya sabes preparar la pasta o, al menos, eso piensas. Siempre es bueno recibir unos consejos para cocer la pasta de la forma correcta y también qué cosas evitar para no estropear el plato.

Trucos para cocer la pasta

Lo primero que debes hacer es asegurarte de que el agua esté hirviendo. Puede que suene tonto pero no lo es, ya que muchos suelen introducir la pasta a la cacerola cuando aún está fría y termina pegándose.

Se recomienda añadir un litro de agua por cada 100 gramos de pasta. Un truco también para evitar que se pegue es agregar un chorro de aceite de oliva o un poco de mantequilla.

En el momento en que hierva el agua, deberás añadir una pizca de sal. Es clave no echarla antes, ya que el agua salada tarda un poco más en cocer. Asimismo, te aconsejamos mantener cerrado la cacerola.

Ahora llega el momento de agregar la pasta que quieras hervir. Puede ser espaguetis, espirales, macarrones, tallarines, etc. No te olvides de mover la pasta con un utensilio de madera y no metálico.

¿Cómo saber si ya está en su punto? El tiempo de cocción de cada tipo de pasta es distinto, pero te puedes guiar según lo recomendado en su envoltorio.

Una vez que la pasta esté hervida, deberás escurrirla en la fregadera con la ayuda de un escurridor o colador. Si bien algunos optan por pasarla bajo el grifo de agua fría, no es lo más recomendable porque perderá parte del almidón y no quedará sedosa y con esa textura tan agradable.