Si acabas de empezar en un nuevo trabajo o llevas ya un tiempo en el actual y sientes que no terminas de encajar en el equipo, hoy en Mag te describiremos cómo utilizar algunas estrategias para ganarte a tu jefe y a tus compañeros. Son más una manera de pensar que un conjunto de trucos, pero si las aplicas, de seguro te beneficiarás de ellas. Así que toma nota.
En algunas situaciones, sobre todo si eres introvertido, la mera idea de tener que volver a ganarte la confianza de un grupo de personas que no conoces de nada y a las que tendrás que ver a diario durante un tiempo considerable puede impedirte siquiera plantearte dejar tu trabajo actual.
Sin embargo, hay algunas técnicas psicológicas que puedes emplear para superar tu ansiedad y, por fin, hacer el cambio de trabajo. A continuación cinco técnicas para mejorar su estado de ánimo en el trabajo, extraídas de varios estudios académicos y del consejo de distintos expertos en psicología.
1. Haz bastantes preguntas
Cuando empiezas en una nueva empresa, lo normal es que al principio te hagan mucha preguntas. Y, aunque el hecho de contestarlas no implique que vayas a caer mejor o peor a tus nuevos compañeros, la psicología recomienda ir un paso más allá y devolver esas preguntas o hacer alguna nueva.
Un estudio de 2017 que se publicó en Journal of Personality and Social Psychology demostró que hacer preguntas era un indicador fiable de la simpatía que reflejaba una persona en un encuentro de citas rápida y que los participantes que hacían más interrogantes eran los que más segundas citas lograban.
2. No tengas miedo a pedir favores
La mayoría considera que por pedirle algo a alguien se va a molestar o a incomodar a esa persona. Sin embargo, a diferencia de lo que muchos puedan creer, a la gente le gusta hacer favores. Un estudio en EE.UU. concluyó que cuando le pides un favor a alguien y te lo hace, acabas cayéndole mejor.
3. Halla a un enemigo común
En una circunstancia en la que acabas de conocer a alguien existen dos formas de intentar conectar con esa persona y en las que lo realmente importante es encontrar cosas que tengan en común.
Lo normal es intentar localizar cosas que ambos gusten y por las que los dos sientan verdadera devoción, pero la psicología ha constatado que, si hay algo que realmente hace que dos personas conecten entre sí es el odio. Así lo reveló, por ejemplo, un experimento realizado en el 2011 en el que se concluyó que, si un desconocido y tú odian a la misma persona, eso los acerca más.
4. Deja en claro que sabes escuchar
No solo basta con escuchar, sino que también tienes que aparentar que estás escuchando. En ese sentido, la psicología expresa que, para que parezca que estás atendiendo, lo mejor es transmitir señales no verbales de calidez y amabilidad, y una de las mejores formas de hacerlo es mirar a la gente con una postura abierta, establecer contacto visual, asentir con la cabeza y sonreír.
5. Pide siempre perdón
El hecho de que pidas perdón no implica que hayas hecho algo mal y ahí podría estar el quid del asunto. Numerosas investigaciones han descubierto que las disculpas funcionan bien tanto para cosas que son culpa tuya como para aquellas que no lo son (el mal tiempo, el atasco que sufre un autobús o una cita en el médico que se retrasa). Esta técnica se conoce en psicología como “disculpa superflua” y los expertos han demostrado que funciona.