Cuando la ola de calor azota no hay mejor salida que darse un chapuzón en la piscina o pileta. El único problema que se puede presentar es cuando se empañan las gafas, esas que evitan que productos químicos dañinos entren en los ojos. ¿Existe alguna solución a este problema? ¿Qué puedes hacer? Aquí, un artículo útil que aliviará tus días refrescantes.
Si nos encontramos ante esta situación solo tenemos dos opciones: reemplazarlas por otras y, la más económica, solucionar el problema con una serie de trucos caseros que compartiremos a continuación.
Trucos para que las gafas de natación no se empañen
Te recomendamos ir por un papel y bolígrafo para que tomes apuntes o en todo caso anotarlo en el bloc de notas de tu celular.
Los sprays antivaho
Son muy útiles, comerciales y generan una película que impide la aparición de vaho. Eso sí, debes saber que no todos son iguales. Por ejemplo, los que se venden para los casos de las motos, crean películas demasiado densas.
Lo ideal es acudir a una tienda que venda productos de natación. Tras adquirirlo, solo debes rociar las gafas y limpiarlos con agua del grifo. ¡Así de sencillo!
Lavavajillas
Uno de los trucos que suelen utilizar los nadadores para evitar que se empañen sus gafas es el uso de lavavajilas. Utiliza el producto de tu preferencia, las mezclas con un poco de agua, frotas suavemente, lo aclaras con agua fría y listo. Procura enjuagarlo bien para que no haya restos de jabón en las gafas.
Patatas
¿El uso de patatas? Es una técnica muy conocida. Este ingrediente que tienes en la cocina contiene almidón, una sustancia que consigue crear esa película de protección haciendo que las gafas no se empañen.
Para este truco casero, solo debes coger una patata fresca, partirla a la mitad y restregarla por el interior del cristal. No tienes que enjuagar los lentes, el almidón hará efecto cuando se seque y, luego de ello, pasa un poco de agua.
¿Cómo proteger los ojos del agua de la piscina?
Y no solo eso, además de cloro, el agua de las piscinas contiene contaminantes que provienen de las propias personas que se bañan en ella, algunos de ellos pueden ser la orina, el sudor, la saliva, o cosméticos que llevamos como bloqueadores solares, bronceadores, desodorantes, colonia, etc.
Por todos estos motivos será bueno que estemos prevenidos y así ahorrarnos salir del agua con los ojos rojos, sea por el motivo que sea. Y las formas más fáciles de protegernos son las siguientes:
- Ducharnos con agua fría antes y después de bañarnos en la piscina. Así los residuos del agua se limpian del cloro y demás sustancias, que pueden quedar en los ojos. Después será bueno secarlos con una toalla suavemente.
- Otra medida que puede parecer muy obvia pero que muchas veces olvidamos, es usar lentes o gafas de natación, protegerán el ojo del contacto con el agua y, por tanto, de todas las sustancias irritantes que contiene.
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