De seguro te ha pasado que al hacer espagueti o alguna pizza casera tienes que rallar el queso. Dejas el objeto en el fregadero, disfrutas de la cena y después de un rato vuelves a la cocina para limpiar los elementos usados, sobre todo, el rallador. ¿Hay alguna manera de dejarlo como nuevo? Por supuesto que sí y aquí en Mag te traemos el truco casero definitivo para conseguirlo.
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Antes de dar a conocer el truco para dejar impecable el rallador, es preciso tomar en cuenta un aspecto muy importante. ¿Cuál es? Hacerlo de inmediato antes de que la comida tenga oportunidad de secarse o endurecerse dentro de los orificios del objeto mencionado.
¿Qué pasa si lo dejo para después? Muy posiblemente sea más complicado de desprenderse de todos los residuos. Asimismo, un error muy común es sumergir el rallador en agua fría. Lo recomendable es en agua caliente durante unos minutos mientras vas lavando los platos y otros objetos utilizados.
Sin más preámbulo, conoce la forma correcta de limpiar un rallador de queso en sencillos pasos.
Cómo limpiar un rallador de queso
Lo primero que debes dejar de lado son las tradicionales esponjas, esas que se rompen y se traban en los orificios con gran facilidad. Para este truco casero, lo ideal será usar un cepillo de dientes.
¿De qué manea? Pasarlo en la dirección contraria al filo del rallador a fin de obtener mejores resultados. También puedes probar sumergirlo en agua caliente durante unos minutos.
Si no cuentas con un cepillo de dientes o no viste resultados en agua caliente, otra buena opción es rallar con él un pan duro. Esto ayudará a desprender los residuos de alimentos. El pan, al ser frotado por el objeto de metal, despegará todos los restos secos, así lo precisa el portal La Vanguardia.
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