La tarde del 23 de diciembre de 2020, los oficiales del Departamento de Policía de Hinckley (Ohio, Estados Unidos) recibieron el llamado de una mujer que dijo haber presenciado el abandono de un niño en un cementerio de la localidad.
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Según explicó, un auto azul los había dejado allí para después huir del lugar a toda velocidad. Aunque tanto el menor como el can intentaron perseguir al coche, no lograron alcanzarlo.
Al llegar a la comisaría, los policías le preguntaron por su nombre y el pequeño dijo que se llamaba Tony. En cuanto a sus padres, solo respondió que su madre se llamaba Katy y su padre David. Tras ello, fue llevado a un hogar temporal.
Horas más tarde, David Centner, jefe de policía de la estación, publicó una foto del niño con el objetivo de recibir más información suya o de su familia. Asimismo, mencionó que quienes quisieran enviarle regalos de navidad, podrían hacerlo sin ningún problema.
La imagen se volvió viral y, algunas horas después, el Departamento de Policía de Hinckley se había ‘inundado’ de ropa y regalos para el niño.
“Me gustaría agradecerles a todos su amabilidad al comprar regalos de Navidad para Tony y sus ofertas para acogerlo y adoptarlo”, dijo la institución en un comunicado vía Facebook. “Todos son personas increíbles y tenemos una comunidad grandiosa aquí en Hinckley, todo el condado de Medina y más allá”.
Se supo que los agentes lograron localizar al padre de Tony, quien “colaboró” con las investigaciones asegurando que Tony estaba bajo la custodia de la madre cuando fue abandonado; no obstante, aún no se han presentado cargos contra nadie pues la investigación aún está en marcha.