Si es puesto al lado de un gato casero, podría ser confundido muy fácilmente como uno más, sin embargo, este felino “herrumbroso”, el prionailurus rubiginosus, nombre que le asignaron debido a sus manchas en el lomo con un color oxidado, es un gato salvaje y es el acreedor al puesto al más pequeño del mundo.
Puede llegar a medir entre 35 y 48 centímetros de longitud y unos 15 a 30 centímetros de cola; tiene un peso máximo entre 900 gramos y 1 kilo con 600; su pelo es corto y grisáceo casi en su totalidad, con pequeñas rayas negras que van horizontalmente en su lomo como un tigre; por último, al igual que sus hermanos felinos, podría pasar el día durmiendo en espacios que los escondan en la naturaleza y cazando insectos y aves para sobrevivir.
Según explicó en un documental la BBC que fue subido a YouTube —actualmente el video tiene 27 millones de vistas y es considerado un viral—, el gato al que tomaron como ejemplo en sus tomas, pese a su tamaño tan pequeño, es uno que alcanzó la adultez casi en su totalidad. Sin embargo, su naturaleza no es distinta, pues este es un animal que constantemente se propone retos a sí mismo con tal de descubrir cosas.
Es conocido como el “colibrí felino” por su color particular y se encuentra en mayor cantidad en los países de India y Sri Lanka, con casi 10 mil felinos en su totalidad, lo que la hace una especie con tendencia a extinguirse.
Y aunque este gato es un pequeño salvaje, no te dejes engañar porque también tiene un lado dócil, dejándose domesticar. Cabe señalar que este gato es activo y muy juguetón.
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