Japón se prepara para un posible lanzamiento en Corea del Norte de un misil de medio alcance, razón por la que el ministro de Defensa Itsunori Onodera ordenará en breve al Ejército que se prepare para interceptar el proyectil, informó la agencia de noticias Kyodo, que se remite a fuentes del gobierno.
La probabilidad de que se lance un misil contra Japón no es muy elevada, dijo una fuente no identificada a la agencia. No obstante, agregó, tenemos que estar preparados para todas las eventualidades.
De acuerdo con la información, ya se ha dado ese tipo de orden en tres ocasiones, pero ésta es la primera que se efectúa antes del lanzamiento del misil. No se hace público para no alertar a la población. Japón dispone de dispositivos para interceptar misiles en buques destructores.
Medios surcoreanos indicaron el viernes que el Ejército de Corea del Norte había desplegado un segundo misil de medio alcance en la costa Este. El misil tiene alcance de hasta 4.000 kilómetros y podría llegar a Corea del Sur, Japón o una base militar estadounidense en la isla de Guam, en el Pacífico.
CHINA CONDENA TENSIÓN EN PENÍNSULA China condenó el domingo las tensiones en la Península Coreana y, en una aparente referencia a Corea del Norte, dijo que no debería permitirse que ningún país suma a una región en el caos, después de que Estados Unidos pospusiera una prueba con misiles para aliviar los rumores de guerra.
El presidente chino, Xi Jinping, dirigiéndose a un foro en la isla de Hainan, no mencionó a Corea del Norte pero dijo que ningún país debería permitirse lanzar a una región e incluso al mundo entero al caos por ganancias egoístas.
La estabilidad en Asia, dijo, se enfrenta a nuevos desafíos, en un momento en el que siguen surgiendo asuntos de gran calado y en el que existen amenazas a la seguridad tradicionales y no tradicionales.
El ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, expresó una frustración similar en un comunicado publicado a última hora del sábado, en referencia a una conversación telefónica con el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
Nos oponemos a las palabras provocadoras y a acciones de cualquiera de las partes en la región y no permitiremos que los problemas lleguen a las puertas de China, dijo Wang, según un comunicado ministerial publicado en su página web.