Si bien el gobierno de Margaret Thatcher, la ex Primera Ministra de Reino Unido fallecida el lunes, es reconocido como uno de los pioneros mundiales en la política de privatizaciones, un país latinoamericano se le adelantó en varios años en la aplicación de esa polémica estrategia económica.
Se trata del gobierno militar chileno de Augusto Pinochet, que algún modo sirvió de modelo para lo que ocurrió después en el Reino Unido.
Pinochet, que llegó al poder tras un golpe de Estado en 1973, adoptó casi desde sus inicios una política económica de desmonte de la influencia del Estado.
Bajo la batuta de tecnócratas educados en Estados Unidos, los llamados ‘Chicago boys’, Chile inició su experimento con la economía de mercado seis años antes de que Margaret Thatcher se convirtiera en primera ministra británica en 1979.
Más aún, el economista austriaco Fredrich Hayek, considerado como el mentor intelectual de Thatcher, visitó Chile para conocer el experimento económico de Pinochet.
Hayek llegó a recomendarlo a la mandataria como un modelo de lo que podrían lograr sus políticas privatizadoras en el Reino Unido, según señala el académico de la Universidad de Nueva York, Greg Grandin, en su libro Empires Workshop: Latin America, the United States, and the Rise of the New Imperialism.
DUDAS Grandin reconoce que, sin embargo, Thatcher dudó que pudiera replicar el modelo chileno en su país, ya que las instituciones democráticas de Reino Unido y la necesidad de un alto grado de consentimiento volvían inaceptables para los británicos algunas de las medidas económicas que Pinochet ensayó en su país.
Ambos casos económicos han sido objeto de vehementes valoraciones por parte de los analistas, tanto a favor como en contra.
En todo caso, la relación entre Thatcher y Pinochet se evidenció en octubre de 1998, cuando el general chileno fue arrestado en Londres tras una orden de captura internacional emitida por el juez español Baltasar Garzón.
El magistrado español pretendía extraditar a Pinochet para juzgarlo en España por crímenes de lesa humanidad. Durante el arresto domiciliario de Pinochet, Thatcher expresó abiertamente su apoyo al militar chileno.