Porta dos Fundos, el grupo humorístico brasileño, vuelve a estar en el centro de la noticia luego de que el edificio de su productora en Río de Janeiro fuese objeto de un ataque con bombas molotov durante la madrugada del 24 de diciembre. Esto sucedió pocas semanas después de que se estrenara en Netflix su especial navideño en el que Jesús es homosexual.
► Atacan con bombas molotov sede de productora que hizo película de Jesucristo gay en Netflix
► Ni el 25 de diciembre, ni en Belén: ¿cuándo y dónde nació Jesús?
► Cómo es crecer en una ciudad donde todo el año es Navidad
La polémica provocó que cerca de 2 millones de personas firmaran una petición para retirar el material, además de recibir la condena de parte de la comunidad religiosa brasileña y que un grupo de legisladores citara a los representantes de Netflix para “dar explicaciones” al respecto.
El escándalo sobre el especial de Porta dos Fundos recuerda a otros casos en los que las interpretaciones sobre Jesús en la pantalla -grande o chica- generó polémica o hasta llegó a ser censurado.
1. La última tentación de Cristo
En 1988 Martín Scorsese se encargó de dirigir la polémica película en la que se puede ver a un joven Jesús, interpretado por William Dafoe, cuestionando su divinidad y la necesidad de cumplir con su propósito de salvación o si tan solo se trataban de alucinaciones.
La última tentación de Cristo, de cuyo guion se encargó Paul Schrader, estuvo inspirada en la obra del novelista griego Nikos Kazantzakis del mismo nombre y publicada en 1955.
El título de la película se refiere a las veces en las que el diablo tentó a Jesús para que abandone la salvación de la humanidad, según la tradición religiosa. Esto se ve plasmado en una de las escenas finales, donde un Jesús ya crucificado se pregunta qué sucedería si decide no morir en la cruz.
Tras su estreno en Estados Unidos se registraron diversas protestas. Luego, la película fue llevada al Festival de Venecia y su llegada no estuvo exenta de manifestaciones. Una de ellas vino de parte del director italiano Franco Zefirelli, quien amenazó con retirar su cinta “El Joven Toscanini” si se proyectaba la cinta de Scorsese.
En Francia se llegó a incendiar al menos tres cines en Francia donde se proyectaba la cinta. Scorsese fue condenado por la Iglesia Católica y el filme censurado en Turquía, México, Argentina y Chile, en este último país no se estrenó hasta el 2004. Mientras que en Filipinas y Singapur la película seguía censurada en el 2010.
Pese a todo ello, la cinta ganó el Bastone Bianco en Venecia en 1988; el Oscar a mejor director y el Globo de Oro a la mejor actriz de reparto en 1989; y el Grammy a mejor música instrumental un año más tarde.
2. La vida de Brian
Esta película la pasó mal desde antes de ser rodada. Protagonizada por el ya famoso sextete humorístico británico Monty Python, “La vida de Brian” se rodó en 1978 en Túnez. Sin embargo, cuando se encontraba de camino hacia el plató de rodaje, los actores se enteraron de que EMI había decidido retirar el financiamiento de la película por temor a que levantara una polémica religiosa.
Y razones no le faltaba. La película se centra en Brian de Nazaret, un joven nacido por el año 0 y en plena noche de Navidad que se enlista en la Liberación Popular de Judea. La historia no se centra realmente en Jesús, pero sí en cómo confunden a Brian con el Mesías.
“Jesucristo no es un personaje especialmente gracioso, uno no puede mofarse así como así de lo que dijo porque su discurso no estaba mal y no es un buen tema para bromear. Fue entonces cuando a alguien se le ocurrió la historia del personaje a quien confunden con un Mesías y esa fue la chispa que nos faltaba”, explica Eric Idle en el libro autobiográfico de los Monty Python, como bien cita el periodista Carlos Prieto en un artículo publicado en el diario El Confidencial.
La película, finalmente, vio la luz en 1979 y todo gracias a un Beatle. George Harrison hipotecó su casa para conseguir las 4 millones de libras necesarias para realizar la película. El tormento por el que debió pasar el filme, sin embargo, no acabo ahí. Todo lo contrario.
Primero se pronunció la archidiócesis católica de Nueva York, seguida de la Alianza Rabínica de América, la Unión de Rabinos Ortodoxos y el Consejo de Siria. “Blasfema”, “ofensiva”, “un ataque contra el judaísmo”, fueron solo algunas de las condenas que recibió la cinta por parte de estos grupos religioso. Manifestaciones frente a los cines donde se proyectó en Estados Unidos y la censura en varios lugares de Reino Unido también estuvieron incluidos en su camino.
Toda la polémica generada en torno a ella, para pesar de sus críticos, terminó convirtiéndola en un éxito de taquillas y en un clásico entre las comedias cinematográficas.
3. Jesús de Montreal
Este drama escrito y dirigido por Denys Arcand -y coproducido entre Francia y Canadá- se estrenó en 1989 y narraba la historia de Daniel, un joven contratado por la Basílica de Montreal para interpretar a Jesús en la representación de La Pasión de Cristo.
En la cinta, Daniel termina investigando a tal punto la vida de Cristo que se comienza a confundir una vida con la otra y convirtiendo el rito sagrado en lo que fue considerado por muchos como una blasfemia. La película es, en sí, una gran crítica a la vida moderna y el materialismo que reina en ella. Sin embargo, también provocó serios descontentos en la iglesia.
Pese a la resistencia eclesiástica pudo granjear grandes éxitos como la nominación a los Oscar de 1989 en la categoría mejor película internacional o ganar en el Festival de Cannes del mismo año.
4. Jesucristo Superstar
Religión y música se juntaron en las mentes de Andrew Lloyd Webber y Tim Rice en plena década de los setentas para dar origen a la ópera rock “Jesucristo Superstar”. Para 1973, Norman Jewison decidió tomar el musical y llevarlo a la pantalla grande en una película del mismo nombre.
En ella, se narra la vida de un Jesús muy poco divino poco antes de su llega a una Jerusalén muy distinta a la que tradicionalmente era narrada. Esta nueva ciudad está habitada por hippies y unos líderes religiosos que supieron acomodarse a la invasión romana a cambio de obtener poder político.
El Papa de esa época, Pablo VI, pidió ver la película antes de ser estrenada. Se le concedió el permisó y el resultado fue que el Vaticano censuró la película... durante más de 30 años. Las razones para hacerlo, según entendidos, era la voz que se le daba a Judas durante la obra y la interpretación de Jesús como un hippie acompañado de un grupo igual de revolucionario para la época.
Recién en el año 2000 y tres Papas después, el Vaticano dejó de calificar la obra como una herejía.
5. El Código Da Vinci
En el 2003, la publicación de la novela “El Código Da Vinci” escrita por Dan Brown y su posterior adaptación al cine, tres años más tardes bajo la dirección de Ron Howard, levantaron una inmensa polvareda de críticas que llegaron tanto desde la Iglesia Católica como de expertos en arte, historiadores o arquitectos.
La obra mezcla una serie de acertijos ocultos en las obras del maestro italiano Leonardo Da Vinci que se van revelando ante los ojos de Robert Langdon (interpretado por Tom Hanks), un experto en simbología que poco a poco descubre la relación que mantenía Jesús con María Magdalena y el verdadero significado del Santo Grial.
Las reacciones no tardaron en llegar. El Vaticano llamó a boicotear la película, luego a emprender acciones legales; el Opus Dei -particularmente mencionado en la obra- pidió que se editara la cinta, en el Perú la Conferencia Episcopal declaró que tanto la película como el libro formaban parte de un “ataque sistemático a la Iglesia Católica”.
Esto se extendió a otros países que incluso llegaron a vetar su reproducción, tales como China, Egipto, India, Jordania, Líbano, Pakistán, Filipinas, Singapur, Sri Lanka o Tailandia, entre otros.
Pese a ello, en su primer fin de semana de estreno la cinta recaudó casi 300 millones de dólares en cines, convirtiéndose en la película con mejor apertura en la carrera de Hanks y de Howard.