Las primeras informaciones sobre el asesinato del exprimer ministro de Japón, Shinzo Abe, mencionaban a una congregación religiosa. A una semana de su muerte, se sabe que el motivo del homicidio estaría ligado a la polémica Iglesia de la Unificación, según la prensa nipona.
Según la BBC, el homicida Tetsuya Yamagami contó a la policía que todo se trató de una venganza: la organización presionó a su madre para donarles tanto dinero que se quedó sin nada. Yamagami pensaba que Abe había beneficiado a la congregación y, por eso, lo mató.
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En respuesta, la Iglesia de la Unificación (o Family Federation for World Peace and Unification) confirmó la afiliación de la madre, pero no dio más detalles.
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Sobre las donaciones, la organización sostiene que las recibe, pero que no son obligatorias. En el caso de los Yamagami, la mujer “vendió su casa y sus tierras hace más de dos décadas para hacer una donación por unos US$700.000″.
¿Y cuál es el vínculo entre Abe y la iglesia? No es clara, pero sí se sabe que este dio conferencias en varios “eventos organizados” por el grupo. La situación es todavía más compleja, sostienen el político japonés del partido NHK, Akihiko Kurokawa, que ve al culto como una expresión “antijaponesa”. Él, además, acusa “al abuelo materno de Abe, el ex primer ministro Nobusuke Kishi, de haber permitido la llegada de esa organización al país en 1958″.
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La secta de Moon
¿Por qué es tan controversial la Iglesia de la Unificación?
1920. Corea del Norte. Nace Moon Yong-myung. Durante la adolescencia, cuenta, el mismísimo Jesús se le aparece y le pide continuar con su misión en la Tierra. Pero hay que limpiar el alma, así que es castigado por el régimen de Kim Il-sung y debe pagar tres años con trabajos forzados.
Moon tiene suerte. La Guerra de Corea convoca a las tropas de la ONU, es liberado y se cambia de nombre.
1954. Corea del Sur. Sun Myung Moon funda en Seúl la Asociación del Espíritu Santo para la Unificación del Cristianismo Mundial. Para el credo, la Biblia está incompleta, así que le agrega el testamento del Principio Divino.
¿Qué propone como verdad? El plan de Dios falló por culpa de Eva, quien tuvo “sexo espiritual” con Satanás y, luego de repetir el plato con Adán, perpetuó la descendencia del Maligno. Moon es el responsable de salvar a la humanidad.
Década del 70. Moon apuesta por Estados Unidos y tiene éxito. Las jugosas donaciones ponen los reflectores sobre el negocio de la fe y lo tildan como un “culto destructivo”. Para 1982, Moon es condenado a un año y medio de prisión por evasión fiscal. El negocio se expande a Brasil. Argentina también es puesta en la mira: de hecho, Moon se reúne con el expresidente Carlos Menem.
¿Cómo consiguen tantas donaciones? Para algunos medios, el 70% de su riqueza viene desde Japón y se calcula en “centenares de millones de dólares”. Otras informaciones sostienen que Moon llevó la friolera de US$800 millones a EE.UU. Porque el dinero llega solo: basta ofrecer objetos con supuestas capacidades espirituales, o estar atentos a los obituarios para llamar a las familias y decirles que el espíritu de sus seres amados pide una donación para la iglesia. Un sencillo para “elevar el espíritu”.
Para seguir creciendo, la iglesia cambia de nombre a discreción. Ahí está la Federación para la Paz Universal (UPF), a la que están vinculados políticos como José Manuel Durao Barroso, Donald Trump y, claro, Shinzo Abe. Según la agencia EFE, Yamagami se habría interesado en Abe luego de que este enviara un videomensaje a un evento del culto.
1992. 92 años. Moon fallece. Se desconoce si cumplió con la misión de Jesús y el paradero de su alma. Deja en el plano físico su fortuna (US$ 900 millones, aproximadamente), acciones en equipos de fútbol, fábricas de armas, autos y “The Washington Times”. Y más de 50 mil fieles que aseguran la vida de la Iglesia de la Unificación.