Más de 240 personas, la mayoría de ellos niños, siguen desaparecidos después de que un ferry naufragase en la costa de Corea del Sur el pasado miércoles.
Este domingo, tras más de tres días de búsqueda, los buzos que participan en el operativo consiguieron entrar en el interior del ferry donde rescataron 26 cuerpos. Con ellos, la cifra de muertos en el naufragio asciende a 58.
Sin embargo, otras 244 personas continúan desaparecidas desde el hundimiento del ferry el pasado miércoles y la desesperación se apodera de las familias de las víctimas después de que el sábado las autoridades informasen que las labores de rescate podrían tomar hasta dos meses.
BBC Mundo le presenta las principales preguntas que surgen del hundimiento del barco.¿POR QUÉ SE HUNDIÓ EL BARCO?Los pasajeros rescatados aseguran haber oído un fuerte golpe antes de que el barco empezara a inclinarse.
Esto podría haber sido causado por la colisión del ferry con un objeto sumergido como una roca o un contenedor hundido.
Sin embargo, el ruido también podría proceder de una gran carga que se soltó a bordo del navío.
Se sabe que el ferry hizo un pronunciado giro antes de enviar un aviso de emergencia, pero no está claro si el cambio de trayectoria estaba planeado o fue consecuencia de un factor externo, según explicó el ministro surcoreano de Asuntos Marítimos.
Los expertos consideran que ese giro radical fue lo que podría haber desestabilizado el navío.
John Noble, un experto en salvamento, asegura que la velocidad a la que se hundió el ferry -en unas dos horas estaba totalmente inclinado hacia un lado- puede dar pistas.
Noble explica que por las imágenes da la sensación de que el banco se inundó rápidamente. Eso puede indicar un gran daño en el casco o fugas en puertas que deberían ser herméticas.
La atención también se ha centrado en quién iba al mando en el momento del accidente.
Según los investigadores, un poco experimentado tercer oficial estaba al timón del ferry y no está claro si el capitán estaba presente.¿HUBO UNA RESPUESTA ADECUADA?El ferry envió la señal de emergencia en torno a las 09:00 hora local (00:00 GMT) del miércoles.
Los barcos y helicópteros de rescate estaban en el lugar del accidente poco después.
“La llamada de emergencia se atendió y hubo una respuesta estructurada por parte de las autoridades”, asegura Bruce Reid, director de la Organización Marítima Internacional (OMI) que promueve la seguridad marítima.
Sin embargo, asegura, es demasiado pronto para llegar a conclusiones sobre la efectividad de la misión de rescate.
También han surgido dudas sobre las instrucciones que se les dio a los pasajeros.
Varios sobrevivientes han dicho que la tripulación les pidió que permanecieran en sus lugares cuando el barco empezó a tener problemas.
Además, sólo una de las dos lanchas salvavidas del barco se puso en funcionamiento. Muchos pasajeros tuvieron que ser rescatados tras lanzarse al mar con sus chalecos salvavidas.
Un miembro de la tripulación, Oh Yong-seok, le dijo a la agencia Associated Press que en un principio trataron de estabilizar el navío. Explicó que pidieron a los pasajeros ponerse los chalecos salvavidas y permanecer en el barco.
La orden de evacuación sólo se dio 30 minutos después, según Oh, quien reconoció que puede que esta no llegase a todos los pasajeros.
Sin embargo, los expertos insisten en que aún es temprano para juzgar las decisiones que se tomaron a bordo del barco naufragado.
En caso de emergencia, la tripulación tiene que tomar decisiones sobre la marcha y algunas pueden parecer cuestionables desde fuera.
“Es obligatorio que el barco sea evacuado en los siguientes 90 minutos”, explica Noble, “pero por supuesto, esto era totalmente irrelevante en este caso”.
“De hecho, no hay una regulación estándar”, explica. “La tripulación tiene que reaccionar en función a lo que ve. Hacer una cosa establecida para unas circunstancias puede ser errónea en otras”.
“Por norma general, yo siempre le diría a la gente que permanezca en el barco porque es el lugar más seguro”, explica. “Pero si el barco se está hundiendo rápidamente, entonces la única respuesta es que hay que evacuar”.
Los pasajeros y la tripulación aseguran que la velocidad a la que se inclinó el barco hacía más difícil moverse dentro del barco y desplegar las lanchas salvavidas.¿QUÉ ESPERANZAS HAY DE ENCONTRAR SOBREVIVIENTES?“El tiempo es el peor enemigo”, explica Reid al advertir que las posibilidad de encontrar sobrevivientes disminuye a cada hora que pasa.
Las corrientes que han obstaculizado las labores de los buzos son igualmente peligrosas para los pasajeros que puedan haber sido arrastrados lejos del barco.
“Esas corrientes son bastante rápidas, lo que significa que el área de rescate será muy amplio”, señala.
Con la experiencia de otros naufragios, los pasajeros han sido rescatados en algunas ocasiones de burbujas de aire.
Sin embargo, hay pocas posibilidades de supervivencia en aguas gélidas como las de la costa de Corea del Sur.
Por ello, Reid considera muy improbable encontrar a pasajeros o miembros de la tripulación desaparecidos en burbujas de aire del ferry sumergido.
“Si alguno lo consiguió, hará ruido instintivamente golpeando metal”, explica. “Estoy bastante seguro de que los rescatistas los escucharán”.